Graco, el cínico, arbitrario, descarado

La ahora ex directora general del Instituto de Crédito de los Trabajadores al Servicio del Gobierno del Estado, Fabiola Urióstegui debería aclarar cómo es que decidió perdonarle al ex gobernador Graco Ramírez el adeudo de un crédito indebido por 600 millones de pesos, cuando éste terminaba su sexenio.
El tabasqueño por fin había sido obligado a comparecer personalmente ante un juez por este, que finalmente es un caso mínimo comparado con los miles de millones de pesos que desvió durante su periodo, usando una perversa red de corruptos encabezados por el hijastro de Graco, Rodrigo Gayoso.
Así pues que por fin, y así fuera por un insignificante caso, el ex mandatario pudo ser sometido a proceso legal, pero inusitadamente Fabiola Urióstegui se desiste de los hechos y le perdona la vida en un hecho condenable y que merece lo aclare, porque con toda razón se especula respecto a un posible soborno de mucha lana, cosa bastante delicada.
Estamos hablando de un dinero que corresponde a los trabajadores y derechohabientes del sindicato, es producto de sus aportaciones y habría que ver qué opinan éstos a través de su dirigencia, es algo muy delicado e incluso, la gobernadora Margarita González Saravia debería pedirle a Fabiola una explicación, no es poca cosa. Lo anterior despierta pues muchas sospechas y lleva a pensar que se resolvió con una lana de por medio.
En cuanto a Graco, pues ya lo conocemos, es un personaje cómico, descarado, corrupto y sabe muy bien cómo se resuelven este tipo de asuntos, no obstante, toca a ella razonar el porque de su actitud.
La ex directora del instituto fue ratificada en el cargo por MGS, ella viene de la administración de Cuauhtémoc Blanco Bravo, desconocemos cómo es que logró mantenerse, pero debería ser llamada a cuentas para acabar con las sospechas de un posible acto de corrupción.
Y bueno, aunque en el comunicado oficial ni se menciona el nombre de Fabiola, nos parece muy acertada la decisión de la gobernadora Margarita de revocarle el cargo y de nombrar en su lugar a Enrique Iragorri Durán, quien además, en efecto ya en dos ocasiones anteriores había tenido esa responsabilidad. Todo indica que se confirmó la componenda con el gracula.