Más Mujeres
Recientemente hablamos de las mujeres en el sector público, pero sobre todo de aquellas que vemos que han ido abriendo brecha para las de su género con trabajo, resultados y mucha honestidad. Sin filias ni fobias, en el Ejecutivo estatal hay algunas que sobresalen por encima del resto, sin tantos reflectores y con un trabajo casi perfecto, han logrado sacar a buen puerto sus responsabilidades.
Estamos hablando de que aún en un gobierno en el que dan más juego y rienda suelta a los hombres, ellas con gran responsabilidad se respaldan con base en resultados. Nos reduciremos a dos casos específicos: el primero es Fabiola del Sol Urióstegui Alvear, actual directora del Instituto de Crédito para los Trabajadores del estado, quien a lo largo de este gobierno y gracias a su experiencia, ha podido sacar a flote al organismo y además hay que decirlo con todas sus letras y sin que nadie se espante que, mucha de la estabilidad entre la base laboral del Ejecutivo se la deben a sus programas y acciones acertadas.
Fabiola del Sol además trae un bagaje político importante, pues no le pesa en lo absoluto desde hacer trabajo territorial a pie de calle, hasta cabildear en las altas esferas de la política. Póngale mucha atención porque es una de las cartas fuertes del ejecutivo estatal, cuyo trabajo y probidad como la espuma la ido levantando y sin los reflectores y otras y de otros, ha ido picando piedra y ya tiene su camino bien trazado.
Decía Alphonse de Lamartine que hay una mujer al principio de todas las grandes cosas y al principio del instituto de Crédito hay una gran mujer que con “meritrocracia” de la buena, de la de a deveras, tiene derecho a levantar la mano y decirle a los líderes del partido en el que actualmente milita que es el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), que quiere y que puede, que tiene con que y que deben tomarla en cuenta en el próximo proceso electoral como una joven mujer con experiencia, agallas que les puede ayudar a ganar espacios importantes.
En segundo lugar y no menos importante se encuentra la Secretaria de Administración, Sandra Anaya Villegas, empresaria exitosa, proveniente de una familia muy trabajadora encabezada por la célebre y siempre recordada “Tía Licha”. Es además una mujer de disciplina que ve a la política como un medio para ayudar a la gente, pues tiene más la necesidad efectivamente de ayudar. También su labor tiene mucho que ver con la estabilidad de la planta laboral del Ejecutivo y hasta ahora su desempeño le ha dado más reconocimientos que reclamos al Ejecutivo.
Tiene menos experiencia política que Fabiola, pero su sobrada capacidad le da para que pueda levantar la mano y ser considerada en el proceso electoral que se avecina. Si el gobernador opta por una buena estrategia y por garantizar triunfos, ellas deben ser consideradas en las principales propuestas electorales. Con casi dos años en la administración estatal, Sandra o “lichita” como la conocen sus cercanos, es una clara muestra de que “el que es perico donde quiera es verde” y una responsabilidad tan importante como es la administración de un estado, la ha podido sacar a pesar de las envidias y los ataques naturales del servicio público.
Ambas mujeres deben ser consideradas más allá de las tribus que prevalecen al interior de MORENA y ellas anotas están para hacer un buen papel en el proceso electoral que está por comenzar.
