La política, acto de amor
Tengamos presentes las experiencias remotas e inmediatas de movimientos populares que han fracasado después de un par de triunfos esperanzadores. La Nicaragua Nicaragüita es una de ellas donde el uso y abuso del Poder obnubiló la conciencia de los dirigentes actuales tirando por la borda lo obtenido con la entrega de vidas enteras.
MORENA está en riesgo de repetir esos errores cometidos por distintas instituciones, grupos y partidos. Aquí en México, el PRD es nuestro doloroso ejemplo.
Sumémosle la perversa actuación de la Derecha local, nacional y mundial que muestra sin empacho su ferocidad salvaje contra la vida de nuestros pueblos. En Europa celebra ya sus victorias electorales. Aquí, nuestra Amerindia, padece en Argentina, a un trastornado individuo que no oculta sus intenciones y sus propósitos. En Perú, sufre un golpe contra el Presidente legítimamente constituido. En Bolivia se libera de la intentona, una vez más, de un enésimo Golpe de Estado.
Por parte de nuestra Izquierda nacional, lamentamos advertir que no se esté preparando una alternativa al sistema sino la simple alternancia al mismo. Parece que la única meta es luchar contra la corrupción olvidándose que ésta es un engendro del capitalismo, del sistema de Mercado, del Neoliberalismo.
Ha prevalecido una política electorera, así como el olvido de lo que debe ser su referente y su base social. No se le ha dado la importancia que merece a la lucha por las ideas y al conocimiento de las mismas, es decir, a la construcción de una conciencia alternativa.
Esto es muy importante. Su intelectualismo, así como su pragmatismo, muestran una total despreocupación por los Principios y por la Ética. Otro problema que se advierte es que ya con el gobierno en sus manos, es posible que evite el lento trabajo de construir conciencias, relaciones de poder desde abajo, militantes, cuadros, dirigentes… proyectos.
No olvidemos que aquí, en Morelos, MORENA está en manos de vivales sin conciencia lamentablemente aplaudidos y sostenidos por la dirigencia nacional. Ulises Bravo y compañía representan un serio peligro para la continuidad y fortalecimiento de los objetivos de la 4ª. Transformación. Pueden causar muchos descalabros que vamos a lamentar si no se opera una pronta y urgente recuperación de la dinámica, la pureza de los principios y los objetivos del partido.
Consideramos que somos una comunidad de morelenses zapatistas consciente de su responsabilidad. Una comunidad informada que tiene claros los objetivos de esta lucha. Una comunidad aquí, que sabe de la urgencia de recuperar sus derechos, que sabe y tiene presente que este Movimiento de Regeneración Nacional, es también de recuperación de nuestra Historia, de nuestro pasado inmediato y remoto, de reedificación de un país distinto al que han venido deteriorando los gobiernos oligárquicos.
Estamos claros de que hay que reconstruir todo lo que ha sido depredado por esos mercachifles. Que estamos recuperando nuestras tierras, nuestros bosques y selvas, nuestros mares y ríos, nuestro petróleo y nuestros minerales.
Estamos claros también de que la Política es Servicio no afán de poder. Que debemos rechazar esa ambición de poder. Que el sentido político de las cosas consiste en dar de comer al hambriento, de beber al sediento, de vestir al desnudo, de dar casa a los sin techo.
Que la Política, en fin, es un acto de amor al pobre, al necesitado. Y que deben repartirse los bienes comunes con equidad, es decir, entregar más a quien más necesite.
Hay muchas luchas dispersas, pero con el mismo objetivo. La lucha de los obreros que se niegan a perder lo conquistado y que ha costado cárcel, represión y vidas humanas. Estamos claros que estas luchas son nuestras y que estamos en una actitud de defensa contra un modelo económico que sólo beneficia a los ricos, a los banqueros y a los empresarios.
Que no queremos que nos arrebaten nuestros derechos laborales… Que no queremos manos privadas extranjeras nuestro petróleo y nuestras minas… Que no queremos recibir salarios de hambre…
No vamos a entregar nuestros suelos, nuestros bosques y selvas a la depredación ambiental y a la ganancia de unos cuantos, por una sencilla razón: La tierra es de quien la trabaja y con nuestra defensa de ella solo estamos haciendo patente que la lucha de nuestro General Zapata no fue en vano. Al seguir los ejemplos de Juárez, Zapata y Cárdenas estamos recuperando nuestro pasado histórico porque lo conocemos y porque no estamos dispuestos a cometer los mismos errores.