Las acciones colectivas en México
En el entramado jurídico de México, las acciones colectivas emergen como un mecanismo vital para la tutela de derechos e intereses supraindividuales, es decir, si la afectación es por el mismo hecho legitima para que varias personas la interpongan. Dichas acciones “organizan” a los afectados, representando un avance significativo en la protección colectiva y la justicia social. En materia legal significa la presencia de los derechos difusos o colectivos, donde el daño trasciende de la esfera individual y afecta a una comunidad en su conjunto. Su incorporación al ordenamiento constitucional mexicano es relevante pues se establece en el artículo 17 constitucional y en su legislación reglamentaria. Estas acciones se encuentran bajo el amparo del derecho a la tutela judicial efectiva en el que el Congreso de la Unión está facultado para expedir leyes que regulen las acciones colectivas, determinando las materias de aplicación, los procedimientos judiciales y los mecanismos de reparación del daño.
Pero ¿qué son las acciones colectivas?, son un conjunto de mecanismos legales que permiten a un grupo de personas, afectadas por un mismo hecho ilícito o daño, actúen de manera conjunta para buscar una solución. Estas acciones están diseñadas para proteger derechos e intereses de carácter colectivo o difuso, que trascienden a los individuos y afectan a una comunidad en su conjunto. En pocas palabras, las acciones colectivas permiten a los ciudadanos organizarse para denunciar la afectación de sus derechos y reclamar violaciones en materia de consumo, servicios financieros, medio ambiente etc. Dentro de sus ventajas es que facilita el acceso a la justicia, reducen los costos en el trámite procesal y promueven un solo juicio en representación de los afectados en vez de promover juicios individuales por cada uno de ellos, en donde los beneficios de la sentencia son uniformes para todos y por ello evita que la resolución sea dispareja. Por ejemplo, si una empresa vendió productos con defectos de fabricación a un gran número de consumidores, estos pueden unirse para iniciar una acción colectiva contra la empresa. De esta manera, se busca una solución más eficiente y justa para todos los afectados. Otro ejemplo importante fue la acción colectiva que interpuso la Procuraduría Federal del Consumidor en contra de Volaris por las múltiples y reiteradas quejas en su contra por cobros indebidos, cambio de horarios en los vuelos, penalizaciones injustificadas, pérdidas de equipaje etc.
La Ley Federal de Protección al Consumidor, el Código Federal de Procedimientos Civiles y la Ley de Amparo son las tres principales leyes que regulan las acciones colectivas en México. Estas leyes proporcionan el marco para que los ciudadanos puedan actuar conjuntamente frente a prácticas ilícitas o daños que les afecten como colectividad. Pueden ser interpuestas por particulares, asociaciones civiles e instituciones públicas especializadas en dichos bienes y servicios como: la Procuraduría Federal del Consumidor, la Procuraduría Federal de Protección Ambiente, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros, la Comisión Federal de Competencia Económica y la Fiscalía General de la República.
Este tipo de acciones se interponen ante un Juzgado Federal, primero se tiene que reunir cuando menos 30 persona que hayan sido afectadas por una causa similar. Esto puede ser un producto defectuoso, un servicio engañoso o cualquier otro hecho ilícito que afecte a un grupo. Segundo, se presenta la demanda ante un Juez en que el representante del grupo (nombrado previamente). En esta demanda, se expondrá el caso y se ofrecerán las pruebas respectivas. Tercero, el juez otorgará 15 días para evaluar si procede o no la acción colectiva. Durante este período, más afectados pueden unirse al proceso. Cuarto, se tramita el procedimiento en sus fases (contestación de la demanda, audiencia de conciliación, pruebas, sentencia y medidas cautelares) y se emite la sentencia en beneficio de todos los afectados.
Usted se preguntará ¿cuáles son los beneficios?, simplemente es más económico presentar una demanda colectiva que múltiples demandas individuales; obliga a las empresas a hacerse responsables de los servicios y productos que ofrecen y reparar los daños causados y finalmente permite que más consumidores obtengan justicia sin tantos trámites.
En resumen, la acción colectiva es una herramienta legal para la defensa de los derechos de los consumidores en México. Promueve la unión de afectados y busca soluciones integrales Si u proveedor te afectó en un bien o servicio nosotros te ayudamos.
