Nuevo vacío a Jorge Gamboa Olea en sesión del TSJ
Después de que nuevamente los magistrados hicieron vacío a la sesión convocada por Jorge Gamboa Olea, el presidente del Tribunal Superior de Justicia afirmó en rueda de prensa: "Yo sigo firmando los cheques que los magistrados cobran... A trabajar y dejarse de cuestiones políticas", exigió.
Y en ese mismo tono que Gamboa Olea considera "conciliador", respondió cuando fue cuestionado en torno a los disensos entre el presidente del Tribunal y los magistrados que provocan la suspensión de sesiones, pues se le señala de que no está legitimado moralmente, por lo que respondió: "Aquí no se trata de cuestiones morales, aquí opera la ley".
Y, sin embargo, al preguntarle sobre las sanciones a que se harán acreedores los magistrados por el vacío en las sesiones, respondió que están establecidas en la Constitución y agregó que son "políticas".
Los magistrados fueron convocados a sesión a celebrarse a las ocho de la mañana. El hecho es que entre los que no asistieron y quienes se pusieron de pie y se retiraron del recinto, en señal de rechazo a la gestión de Gamboa Olea y su desconocimiento como presidente del TSJ, quienes lo secundan no reunían el número suficiente para alcanzar el quórum legal, por lo que esa “sesión” convocada por “el que firma los cheques de los magistrados” no duró más allá de unos momentos.
No obstante, Gamboa Olea, en la rueda de prensa, trató de ofrecer una impresión de “normalidad” en la labor de magistrados y jueces: “El Poder Judicial se encuentra trabajando, se encuentra funcionando, desarrollando cada una de las funciones que le encomienda la Constitución”, excepto la de sesionar, porque no se reunió el quórum suficiente una vez más.
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Sin mencionarlos, hizo referencia a los magistrados que lo desconocen señalando que cuando los integrantes del Poder Judicial rinden protesta, se obligan a servir y a dar los resultados que la sociedad espera. “El Poder Judicial está trabajando. Hay una resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación”, afirmó, sin aclarar que el máximo órgano judicial del país no solo no le dio la razón a Gamboa Olea, sino que incluso no analizó de fondo el caso, a pesar de que al menos siete ministros de la Corte se pronunciaron en contra de su permanencia al frente del Tribunal Superior de Justicia de Morelos.
Respecto de la parálisis de la institución, Gamboa Olea culpó de no cumplir con la responsabilidad jurisdiccional a los magistrados. “Yo seguiré convocando a las sesiones del pleno. Seguiré haciendo las funciones que me tocan al frente del Poder Judicial y como lo dije en la sesión del pleno: a mí me toca seguir encabezando y representando al Poder Judicial, en tanto no culmine mi período”.
Justificó la necesidad de sesionar basado en expedientes que es necesario analizar, y cuando se le preguntó en torno a quiénes están detrás de los intentos de desestabilización del Tribunal, respondió: “Creo que es decisión de cada una de las magistradas y magistrados tomar ese tipo de decisiones. Considero que, en este punto crucial para la vida de la entidad, lo que menos necesitamos es un Poder Judicial politizado”.
Con respecto a si pondría sobre la mesa su renuncia para devolver la estabilidad a la institución, se negó enfáticamente, afirmando que su legitimidad en el cargo está avalada por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, cuando ese órgano federal no analizó de fondo la controversia constitucional para prolongar su mandato y dejó la puerta abierta para, mediante otras vías legales, seguir un proceso que lleve a Gamboa Olea a salir de la encomienda.
