Un PRD seducido y prostituido
Testigo de los fracasos del PRD en Morelos comparto estas reflexiones no sin desconciertos y angustias por lo que ahora significa ese partido en el escenario político actual. Para facilitar, vámonos con cierto orden.
Desde hace más de 20 años (que no son nada) el Comité Nacional del PRD abandonó a sus mejores cuadros presa de su pragmatismo a ultranza y de su autocomplacencia. Coqueteó abiertamente con personas de relevancia económica esperando que aceptaran ser propuestos con la intención de obtener triunfos electorales. No quiso darse cuenta de la trayectoria de trabajo y honestidad de esos individuos para comprobar que eran ajenos a ambiciones personales.
Nunca consultó el CENcon la militancia de base o con los diputados de esa entidad o con sus, todavía escasos, alcaldes. Las consecuencias generaron una militancia resentida y desinformada que, antes de escuchar algún planteamiento político estaba más atenta para desacreditar y descalificar al compañero que se atrevía.
Así, el PRD, convertido en una agencia de colocacionesempezó a cosechar lo sembrado. Recuerdo al “Pino” Salvador Mtez. de la Roca, jugar con la consigna diciendo: Ora sí, ¡Democracia ya, chamba para todos!
La respuesta popular fue absolutamente coherente, lógica. No apoyó a un partido con los enemigos en casa que se atacaba públicamente con singular denuedo; un partido transparente, tanto que todo mundo pudo ver sus carencias y sus encuereces. ¿Cuál lucha por la Democracia y por la Justicia? ¿Qué clase de “democracia”? ¿Esa que sólo consiste en levantar la mano?
Repitieron hasta el cansancio, creo que aún ahora, que el PRD es, era, un partido de Izquierda. Bien, aceptemos, Pero, obras son amores… No fue así. El PRD se convirtió en un partido más que no logró abanderar las causas revolucionarias y populares. Porque, un partido así busca, en su militancia, convicción revolucionaria, compromiso político con el pueblo, testimonio de una conducta digna y ética a toda prueba, todo lo cual no es gratuito ni repentino, se forja en la práctica y se comunica con el ejemplo.
La transformación revolucionaria no pasa por la “lucha partidista”, ni por las ONG, ni por los sindicatos, ni por las universidades, ni por las comisiones de DDHH. Hoy por hoy todas esas instituciones abrigan un afán reformista, más o menos contestatario que se queda en el discurso. Ataques vanos, denuncias hueras al neoliberalismo; rechazos a las privatizaciones y al manejo gerencial de la política; protección del Medio Ambiente, búsqueda de la equidad de género. En efecto, la transformación revolucionaria no pasa POR ellas, pero, tampoco pasa SIN ellas.
El PRD debió continuar como un partido opuesto rotundamente al proyecto económico neoliberal que consiste fundamentalmente en la desaparición del Estado como Eje rector de la Economía y el fortalecimiento del Mercado como regulador de todo, proyecto que ha dañado profundamente al pueblo trabajador.
Oponerse asimismo a la privatización de empresas paraestatales, PEMEX y las otras mil cien desde Salinas. ¿Y qué fue lo que hicieron los dirigentes? Firmar, sobornos de por medio, el Pacto por México con EPN. ¿Cómo pues? ¿Alguien dijo algo, levantó su manita, abrió su boquita? Un dicho popular dice: “De que los hay, los hay. Nomás hay que llegarles al precio”.
El PRD debió exclamar su oposición al Latrocinio perfectamente legalizado tal como sucedió con la esclavitud o el Señorío/Servidumbre en el Feudalismo. Latrocinio llamado FOBAPROA/IPAB cometido contra el pueblo pobre que paga ahora las deudas de los ricos.
Oponerse también a los discursos mochos, reaccionarios y fanatizados que se emboscan en símbolos muy queridos del pueblo mexicano para manipular, enajenar y chantajear. Basta con ver al trastornado de Verástegui aquí en México o al cavernario de Milei en Argentina.
¿Cómo desarraigar de este partido los vicios que ha prohijado gracias a sus prostituidos dirigentes? ¿Cómo lograr que sus militantes se reconozcan como compañeros de viaje y no como adversarios hostiles? ¿Cómo hacer que los jóvenes que acaban de ingresar a sus filas no acaben desencantados y frustrados al comprobar conductas corrompidas de los mayores?
Finalmente, por hoy: ¿Cómo evitar los estragos que causa al espíritu humano la seducción del poder?
Morelos está perdido para del PRD hoy. Más aún con la entrega de sus bártulos, su yelmo… su adarga al brazo, toda fantasía… y su lanza en ristre,toda corazón.
Y yo, como Rubén Darío, cuando quiero llorar no lloro… y, a veces…
*IR