Cuernavacenses temen que se repita sismo similar al de S-19
A unos días de que se cumpla un año más del sismo del 19 de septiembre del 2017, la ciudadanía está a la expectativa si éste 2023 se llegará a reportar otro movimiento telúrico, tras recordar que hace casi seis años fue Axochiapan el epicentro, por lo que hay temor de que se vuelva a repetir.
Guadalupe Rosas, originaria de Coajomulco, en el municipio de Huitzilac, compartió que aunque no sintió el terremoto con mucha intensidad recuerda realizaba sus labores de ama de casa cuando todo comenzó a moverse: “Todo se me olvidó, hasta dejé prendida la estufa. Afortunadamente no hubo afectaciones fuertes como en otros municipios. Se movió todo muy feo hasta pensé que se iba a caer mi casa, pero no. Nadie sabe cuando va a temblar, esas son cosas de Dios, por eso hay que estar preparados en la vida espiritual”, dijo.
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Aunque no se encontraba en Morelos, Francisco Romero, explicó que estaba trabajando en Chilpancingo, Guerrero, cuando se presentó el siniestro, el cual sintió muy fuerte y aunque duró unos 40 mínimos, para él fueron una eternidad, ya que no sabía cómo estaba su familia en Morelos: “Estaba adentro del coche porque a mí me agarró en el tráfico. Todos estábamos parados y no supimos qué hacer. No debe uno correr ni espantarse. Estas son cosas de la naturaleza y no se puede saber cuándo van a pasar. Hoy tenemos que aguantar a ver si otra vez hay otro fenómeno similar”, abundó.
Por su parte, Maricarmen Rodríguez recordó que en Chamilpa cuando comenzó a sentir cada vez más fuerte el temblor, lo primero que hizo fue colocarse debajo de los marcos de su puerta para evitar que algún objeto pesado le cayera encima, atendiendo algunas recomendaciones mismas de PC: “En mi casa gracias a Dios no hubo afectaciones. Ahora que viene otra vez el 19-S creo hay que estar prevenidos. No correr tampoco, quedarse en un solo lugar. Mi hijo es paramédico y él hace ese tipo de simulacros. Recuerdo que todos los vecinos comenzaron a salir de sus casas muy asuntados y los niños lloraban y los consolé. Es muy bonito porque todas estas son obras de Dios”, concluyó.