Raihaanah en Auditorio Ilhuicalli
El fin de semana, la compañía Raihaanah de danza árabe se presentó en el escenario de Auditorio Ilhuicalli, en Tepoztlán. Durante diez años, han decido ejecutar el cierre de temporada de ciclo, las alumnas muestran su talento.
El movimiento de vientre, en diferentes estilos y técnicas, esta danza, es una experiencia humana compartida, con un lenguaje universal que nos conecta, así, lo expresó la maestra Brasilia Martínez Montes de Oca, directora.
Añadió, la danza del vientre se conoce como danza árabe sharqi, es una danza expresiva árabe, que enfatiza los movimientos complejos del torso. En países donde es popular esta disciplina, la mayoría de sus habitantes empiezan a practicarla desde muy corta edad.
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En forma circular, generalmente se ejecuta la danza, se acompaña con diferentes movimientos del cuerpo.
Para está ocasión presentaron: Tribal, clásico, velo, charola, alas de mariposa, pop, abanicos de seda, pandero.
La danza en el mundo, son un mosaico histórico, herencia y evolución compartidas. Entre las diversas ejecuciones, las bailarinas se acompañaron de varios elementos, los cuales les permitieron mostrar con suavidad y sutileza, para cubrir y descubrir su cuerpo entre giros; cada una, durante las clases aprenden fuerza y ciertas habilidades. Agregó Martínez.
El extender sus brazos, con ayuda de unas alas de coloridos colores, símbolo de pureza, elevación y evolución. Enfatizó, también la danza clásica y contemporánea, con grandes desplazamientos, vueltas y movimientos de todas las partes del cuerpo, pero sobre todo de la cadera.
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Es una danza muy alegre, por eso nunca hay que perder la sonrisa cuando se baila y la expresión en el rostro y el cuerpo. Al moverse, hay que, contagiar de esa alegría a todos los que la vean.
Recibir por diez años, en el escenario de Ilhuicalli ha representado una nueva oportunidad para reconocer esta disciplina como aporte cultural que enriquece el turismo cultural, que tanto hace falta para el municipio. Y, sobre todo, mostrar calidad, disciplina y profesionalismo.
Brasilia finalizó, en cada ejecución incluyo un estilo moderno, experimentar con otro tipo de danza, nos permite que cada seis meses podamos estar presentando algo diferente, atractivo tanto visual, vestuario, en música y en pasos.
El escenario de Auditorio Ilhuicalli, continúa con su objetivo de promover, presentar y mantener una programación. Así, lograr un espacio cultural, donde sea punto de encuentro con el artista y el público. Fusionar energía, rodeado de las montañas del pueblo mágico.
