• Presupuestos vs resultados; otro feminicidio
La separación de los intereses entre el Congreso del Estado y el Poder Ejecutivo, sobre la definición del presupuesto de egresos para el próximo año 2023, parece que no encontrará un punto de coincidencia que genere los equilibrios necesarios y la racionalidad en el gasto público. Como se ve, Morelos y la población, seguirán padeciendo entonces la falta de atención a los problemas principales, y, sobre todo, la ausencia de un desarrollo debido precisamente al dispendio y al uso malsano de los dineros.
Y es que como se ven las cosas a punto de finalizar el presente año 2023, de no llegar a un acuerdo en la reasignación de recursos, y ante las diferencias entre los diputados y el gobernador, lo más probable es que no haya un nuevo presupuesto y en su caso, se vuelvan a ejercer los recursos con base a la “planeación” utilizada en este 2022.
Pero al margen de los mecanismos parlamentarios y legales que habrán de definir el ejercicio financiero del 2023, lo que queremos destacar hoy es que a cuatro años de la gestión del gobiernola inversión pública para el desarrollo del estado ha sido prácticamente inexistente, y lo más visible es la ausencia de obra pública.
Si algo se le ha criticado a la actual administración es que como nunca no se ha atendido el tema la infraestructura para el desarrollo, ni en su mantenimiento ni en su modernización. Hoy el estado carece, en cuatro años, de aquellas obras emblemáticas que solían ser el sello del gobierno y legado para la posteridad, pero lo peor es que ni siquiera lo que existe ha recibido el sostén para su conservación. Peor aún, no existe para el resto de la gestión de dos años ningún proyecto digno de mencionar.
Y uno de los rubros en los que se han destinado mayores recursos en los últimos años es el de la seguridad pública, sin embargo, este sigue siendo el principal problema no resuelto y, sobre todo, que más lastima a la sociedad. En términos reales, el fracaso en el combate a la criminalidad y a los grupos delictivos, ha resultado una incongruencia frente a la creciente inversión y, sin duda, los resultados no son proporcionales a la misma.
Podríamos abonar más ejemplos sobre el abandono oficial en rubros tan importantes de la economía local, como en el campo, el turismo, incluso en la desatención a las necesidades de infraestructura social como en salud y educación, y lo cierto es que para colmo con el manejo de los recursos, hoy se gasta más en la imagen pública de los funcionarios y del gobierno, que precisamente en la rehabilitación y construcción de aulas y escuelas, de ese tamaño es el despilfarro que hoy si es el sello de la administración del gobierno del la 4T en Morelos, veremos…
L@S REDES:Tras el manejo mediático que tuvo el caso del feminicidio de Ariadna “N” y que confrontó a las fiscalías de Morelos y de la CDMX, entre muchas otras cosas, sigue causando escozor las contradicciones que persisten en varias carpetas que la oficina local ha llevado al cabo, y para muestra, uno de los casos más recientes es el de Patricia, cuya necropsia arroja una muerte por enfermedad, pese a que los familiares aseguran que se trató de un maltrato prolongado y cuyo presunto responsable es su pareja. No obstante, y luego de ser detenido, en días pasado fue liberado por “falta de pruebas”. Lo que ha causado indignación entre la familia de la víctima y de población de Alpuyeca, donde se registraron los hechos, es que se supo que el resultado de la necropsia arroja una muerte derivada de una lesión cerebral, pero no como causa de un traumatismo sino a “un suceso patológico”, es decir, una enfermedad. Convencidos de cómo se las gastan en la Fiscalía, y ante las suspicacias que se han presentado en varios casos de presuntos feminicidios, los señalamientos por actos indebidos y “corrupción” no se han hecho esperar y, sin embargo, la realidad es que las expectativas de que en este asunto sí se haga justicia, se ven también muy lejanas, veremos…
*IR