• Un fiscal en aprietos
El caso Aridna Fernanda López, la joven mujer ultimada hace más de una semana en la Ciudad de México y hallada en el municipio de Tepoztlán, metió en un brete al fiscal del estado Uriel Carmona y le abrió la puerta para salir de esa dependencia, en lo que parece ser una jugada de ajedrez que le daría por fin al gobernador Cuauhtémoc Blanco, la posibilidad de colocar allí a un funcionario de su equipo, esto a cuatro años de intentar hacerse de esa posición que le heredó su antecesor Graco Ramírez, a quien en no pocas ocasiones se le ha acusado de encubrirse desde allí y a varios funcionarios que lo acompañaron e hicieron y deshicieron en su gestión.
Yes que la gobernadora de la CDMX, Claudia Sheinbaum, quien solicitó a la Fiscalía General de la República (FGR) iniciar un proceso por el delito de encubrimiento del presunto feminicidio de Ariadna por parte del Fiscal morelense, seguramente recibió luz verde y tendrá todo el apoyo del gobierno de la 4T para llevar este proceso hasta conseguir su objetivo. Las acusaciones de la muy probable candidata de Morena a la Presidencia de la República, fueron directas y sin tapujos al señalar “protección y encubrimiento” de la Fiscalía del Estado en favor del principal amputado en el caso.
Como sabemos Uriel Carmona se apresuró a descartar el delito de feminicidio en este caso y atribuyó la causa de la muerte de Ariadna a una “congestión alcohólica, versión que no sólo resultó inverosímil para familiares y amigos de la víctima, sino que llamó poderosamente la atención del gobierno del CDMX y motivó la intervención directa de su titular, una mujer que además de ser inflexible contra la violencia hacia las mujeres sabe capitalizar eventos como estos en momentos claves previo a las decisiones políticas que habrán de suceder, de cara al año 2024.
El caso que es de dominio social y ha causado indignación en la opinión pública del país, atrae más y más reflectores y obliga a los actores de todos los poderes y todos los niveles a tomar cartas y esto lo sabe la jefa del gobierno capitalino, por lo que a pesar del fuero que ya ha sido un trabuco en otras ocasiones para proceder contra el fiscal del estado, como lo ha impulsado el equipo del ex futbolista Bravo Blanco, contaría esta vez con el apoyo del Congreso de la Unión.
Y es que cabe recordar que en marzo de 2021, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) presentó una denuncia ante la Fiscalía General de la República para iniciar una investigación en contra de Uriel Carmona por supuestas operaciones con recursos de procedencia ilícita, principalmente por su presunta relación con grupos delictivos relacionados con el narcotráfico, por lo que entonces se buscó retirarle el fuero para que procediera la investigación en su contra; sin embargo, en agosto de 2021 la Comisión Permanente de la Cámara Baja pospuso la solicitud y el fiscal conservó dicho fuero.
Habrá que decir que al margen de la justicia que se busca para Ariadna y que en cualquier caso el gobierno está obligado a otorgar, el mayor beneficiado con la inminente caída de Uriel Carmona sería el gobernador Cuauhtémoc Blanco y su equipo de colaboradores, pues pasarán factura sobre una posición que ha buscado desde el inicio de su gestión y que, en todo caso, se convirtió en uno de los varios pretextos ante la falta de respuesta y soluciones al grave problema de la inseguridad y la violencia que padece el estado y sus habitantes.
El actual gobierno morelense y promotor de las 4T, no sólo ha sido incapaz de asumir su responsabilidad para garantizar la seguridad de la población y de ser ciertos sus reiterados señalamientos de obstrucción de la Fiscalía por la falta de confianza o rivalidad con su titular, no puede sustraerse de esa responsabilidad ante el fracaso de la estrategia y el modelo de mando de la policía, y demás acciones que han resultado un fiasco desde la Comisión Estatal de Seguridad Pública (CESP).
Por su parte, resulta evidente para muchos que el accionar de la Fiscalía ha sido parcial, se ha corrompido y presenta vicios de origen, cuando el peor gobernador del estado, Graco Ramírez, fraguó las modificaciones al mecanismo de elección de Uriel Carmona, que le permitió asegurar su permanencia, una vez que tomara posición el gobierno de Blanco Bravo en el 2018, por lo que ya va siendo tiempo de reparar lo que a todas luces es de origen una perversión política, veremos…
*IR