“ATRAPANOVIOS”, juguete mexicano
Dice la tradición que, si colocas este cilindro tejido con hoja de palma en el dedo índice de la persona que te hace sentir mariposas en la panza, no se podrá ir sin ti. A pesar de los años, se sigue jugando con está artesanía.
Como buenos mexicanos, es ejemplo vivo de la picardía, alegría, creatividad e ingenio con el que, nuestros abuelos y padres crecieron. Este 14 de febrero, decídete y atrapa a ese ser que te trae y te trae cacheteando las banquetas. También puedes hacerle la broma a una amiga o amigo.
El atrapanovios, elaborado por artesanos mexicanos, de los estados de Campeche, Guerrero, Michoacán, Oaxaca y Puebla. Con sus dedos trenzan la hoja de palma, en su mayoría llevan colores vivos.
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Funciona como una trampa para la persona que haya metido su dedo, porque al tratar de zafarse no podrá y se quedará contigo. No se espanten, hay manera de zafarse, para sacar el dedo se comprime un poco el cilindro y el dedo sale sin problema.
Juguete que sirve de amarre al momento de buscar el amor; se recomienda, sí quieres compartir momentos únicos con alguien especial, al sentirse seguro de haber encontrado a la persona indicada.
Como mexicanos es importante compartir a nuevas generaciones, esta artesanía trenzada con materiales naturales de la región y, así continúe la tradición de afirmar el amor, por medio de este juego y no dejar escapar el verdadero sentimiento. Por lo menos será un inolvidable momento para iniciar una sincera amistad,
De manera entretenida podemos vincular y dar vida al trabajo artesanal; lo cual lo integra a una idea de arte. Pieza de tejido colorido, aparte del uso tradicional, puede ser un adorno, recuerdo lleno de color y vida.
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El juguete mexicano aún tiene mucho que decir sobre nosotros. Los artesanos tienen que caminar kilómetros para recolectar la palma fresca, después deben teñir de colores para darle vida a cada caja de cuatro hojas de palma.
Se deja secar por un par de días a los rayos del sol. Cuando deciden empezar a tejer deben de mojarse con agua para que tenga flexibilidad y no cueste trabajo trenzar.
Una pieza elaborada por manos mexicanas, nos permite encontrar el dialogo, la historia, cultura y, sobre todo, la imaginación de conquistar a esa persona especial.
Su costo entre 15 a 18 pesos, los artesanos los encontramos caminando por el Centro Histórico de Cuernavaca, en los pueblos de Tepoztlán, Tlayacapan, Yecapixtla, entre otros.