Toda lucha es una oportunidad de aprendizaje

Las derrotas son pasajeras si sacamos las lecciones de ellas. Los triunfos fortalecen cuando se piensa en el siguiente paso. La perspectiva emancipadora de la clase trabajadora requiere estrategia con raíces históricas y visión de futuro. Toda lucha es una oportunidad de aprendizaje.
Por ello, compartimos las resoluciones adoptadas por las organizaciones sindicales, sociales y pertenecientes al sector cooperativo y de la economía social y solidaria, reunidas los días 23 y 24 de noviembre de 2024 en la V Conferencia Nacional de la Nueva Central de las y los Trabajadores, con el objetivo de poner en común un análisis de la situación nacional que nos permita avanzar en la rearticulación del movimiento social, democrático e independiente, donde se reconoce la complejidad de una coyuntura marcada, en lo internacional, por la extensión y profundización de las guerras y la política armamentista, tal y como lo muestran la guerra en Ucrania y el genocidio de Israel sobre el pueblo palestino, el alarmante ascenso de posiciones políticas reaccionarias, ultraconservadoras y abiertamente antipopulares, como lo muestra la llegada de Donald Trump al gobierno de Estados Unidos por segunda vez, y la guerra comercial protagonizada principalmente por Estados Unidos y China que, sin embargo, converge con la permanente resistencia de los pueblos, de importantes sectores de trabajadores y trabajadoras, pueblos indígenas, movimiento feministas y estudiantiles.
En la Declaración Política de la Nueva Central de las y los Trabajadores se expresa que en el inicio de un nuevo sexenio de gobierno que surge de una histórica derrota de los partidos tradicionales identificados claramente con la época neoliberal en nuestro país y la consolidación de la llamada 4ta transformación que si bien ha impulsado importantes iniciativas de carácter popular, no ha establecido un verdadero diálogo con las y los trabajadores, por lo que tampoco ha significado la solución de fondo de los problemas sociales más sentidos para la clase trabajadora y la población en su conjunto.
Ante la persistencia de la precariedad laboral en materia salarial, de empleo y de las pensiones y jubilaciones, nos pronunciamos por un aumento salarial de emergencia que incluya a los salarios contractuales y las jubilaciones; por la cancelación del cobro de impuestos a las prestaciones laborales; por un sistema social, solidario e intergeneracional de jubilaciones y pensiones, y contra el cobro de las mismas en UMAS; y por la reducción de la jornada laboral a 40 horas con pago de 56, aun advirtiendo sus limitaciones y la necesidad de apuntar a la implementación de una escala móvil de las horas de trabajo. Exigimos que se garantice el derecho a la estabilidad en el empleo para todas y todos los trabajadores. Pugnamos por el abandono de una estrategia de integración subordinada en la globalización y el T-MEC basada en el abaratamiento de la mano de obra y la paz laboral.
Reconocemos la importancia de la Reforma Laboral de 2019 por su objetivo de transformar las relaciones laborales poniendo al centro el respeto y el fortalecimiento de la democracia y la independencia sindical, sus resultados son limitados y contradictorios, siendo alarmante la continuidad del diálogo privilegiado con el sindicalismo corporativo y de protección. Consideramos que existen las condiciones para que el sindicalismo independiente pase a la ofensiva y asuma un papel protagónico en la organización y articulación de amplios sectores de trabajadores y trabajadoras, por lo que llamamos a redoblar los esfuerzos para la construcción de la opción democrática, autónoma e independiente de las y los trabajadores.
La Nueva Central de las y los Trabajadores reconoce la importancia de la participación de las mujeres trabajadoras en las luchas laborales y democráticas en nuestro país, así como la existencia de sus demandas específicas surgidas de la histórica opresión del sistema capitalista patriarcal, por lo que es necesario que las organizaciones democráticas asuman acciones para reducir y erradicar las condiciones de precariedad laboral, las brechas de desigualdad, la informalidad y la violencia y acoso sexual y laboral.
Ante la continuidad de una política presupuestal que refleja los síntomas de un modelo agotado de recaudación fiscal injusto, orientado a gravar más a quienes menos tienen y a fomentar el incremento desmedido de las grandes fortunas, consideramos urgente la necesidad de impulsar una reforma fiscal profundamente progresiva, y a iniciar un proceso orientado a la suspensión del pago de la deuda pública, así como la cancelación de las otras deudas ilegítimas como la del FOBAPROA.
Es necesario empujar una nueva Ley General de Sociedades Cooperativas, construida por las y los propios cooperativistas, con el objetivo de contribuir al verdadero desarrollo del Derecho Cooperativo. Buscamos cambiar sustancialmente la política gubernamental que, en beneficio de los grandes capitalistas, ignora las necesidades y potencialidades del sector cooperativo y de la economía social solidaria.
Ante la magnitud de la crisis climática y ambiental que coloca al conjunto de los pueblos frente al riesgo de la sostenibilidad de la vida misma, luchamos por una transición energética justa y democrática y por la plena defensa de los bienes comunes, colocando al centro el acceso al agua y la energía como un derecho humano; la participación de las y los trabajadores, de los pueblos y comunidades en la definición de las políticas que den paso a esta transición. La defensa de nuestros derechos e intereses van más allá de las coyunturas electorales y de quiénes se encuentren al frente de los gobiernos, se requiere de una constante movilización entorno a nuestras propias reivindicaciones como clase y del impulso a una plataforma de unidad de acción que incorpore el conjunto de estos planteamientos como práctica fundamental de la solidaridad entre las y los trabajadores y los pueblos. En ese sentido, en el ámbito internacional exigimos el alto al genocidio contra el pueblo palestino, y en el terreno de lo nacional nos pronunciamos firmemente por la solución de los conflictos sociales y laborales vigentes y por el pleno respeto a los derechos laborales y a la integridad de quienes los defienden.