Gobierno actual y las expectativas de los morelenses
Llegó en medio de poca credibilidad política, por su falta de participación en algún cargo público, puesto que aun cuando ha sido partícipe en actividades partidistas, no se había postulado anteriormente. En la competencia por la gubernatura no fue clara y sin embargo, se enfiló como candidata al Gobierno del Estado de Morelos, por el partido oficial. Sea como sea, logró ser la candidata y sea como sea se convirtió en Gobernadora. Hasta ese momento, ni la oposición, sus críticos y hasta integrantes de la organización oficial, aun cuando ya era gobernadora electa, no tenía la confianza plena, más allá de la simpatía y las filias políticas. Pero a partir del primer día de su gobierno, en la toma de posesión, dio muestras de que venía a trabajar.
Hoy, tan solo a 25 días de su gobierno ha dado muestra diariamente de tener la disponibilidad de trabajar con seriedad. Hoy, se percibe otro ambiente.
En seguridad aumentó el salario a los policías estatales y las reuniones a las que convocó a todos los involucrados en el área de seguridad en el orden estatal y federal, con la conducción del Secretario de Gobierno y eso, así de simple, comenzó a cimentar la confianza en su gobierno.
Ahora, se le escucha acerca de la organización de las dependencias para optimizar el trabajo en cada una de ellas. Eso implica que tendrá, a través de sus subalternos de ir bajando las ideas, las ordenanzas y las decisiones, para cambiar actitudes, hacer eficientes los recursos, es decir, cuidar el presupuesto.
Se le ve visitar a las localidades del Estado de Morelos. Ha tenido reuniones de trabajo real, revisando aún las necesidades. Comparte ideas y escucha propuestas.
A los incrédulos, críticos, escépticos como el que escribe, les ha costado trabajo aceptar esa realidad, pues solo se había visto gobernantes voraces, ambiciosos, enfermos por el poder.
Pero se comienza a visualizar una nueva forma de gobernar.
Esperemos haya una buena relación de poder a poder entre el ejecutivo y el legislativo. El judicial es especial, pero también es necesario que los tres poderes equilibren el poder para que Morelos tenga un mejor desarrollo.
Los morelenses venimos de dos sexenios en los que se caracterizaron por el robo a ojos vistos del erario, por el gasto excesivo en imagen, por la falta de inversión en infraestructura para el desarrollo, por la falta de inversión al campo, a la salud, a la educación.
Si Margarita González Saravia mantiene esa línea de trabajo, seguramente se podrá combatir la corrupción en la obra pública, en los servicios como el transporte público, en el sector salud.
Y que se trabaje en un proyecto integral de desarrollo, infraestructura para el agua, para las carreteras, los caminos de saca, apoyo al campo. Hace falta mucho. Pero lo que logre será bueno para los morelenses.
La tierra ha sido abandonada, se requiere producción de básicos alimentarios. Pero los campesinos también tienen buenas expectativas en la Gobernadora. Se escucha de ellos que se comprometió a construir presas, mejorar los sistemas de riego, apoyo para aumentar los cultivos.
Ya es hora que tengamos buen gobernante. Ojalá y no nos desilusionemos más adelante. Estaremos al pendiente.