Fiscalía y CES permitieron impunidad// Inseguridad, ¿deuda impagable?
Las víctimas de la violencia en Morelos son incalculables, lo único que podemos decir es que se trata de miles, y la mayoria de ellas son jóvenes, caídas a manos de los grupos criminales, que fueron dominando territorio ante la complacencia de las autoridades "competentes".
La desgracia a alcanzado a todos los sectores, diríamos que no ha escapado nadie, doctores, comerciantes, campesinos y, desde luego, abogados, cuya actividad es de alto riesgo y de ahí que levanten la voz para pedir seguridad ante sucesos muy preocupantes en su gremio. La Asociación de Abogados Penalistas, en voz de su presidente, Ricardo García Bravo, respaldado por integrantes de diversas agrupaciones del ramo, pidió a la gobernadora electa, Margarita González Saravia, atender el tema.
Calcularon que de unos años a la fecha, por lo menos 20 abogados han sido asesinados, sin que las instancias responsables de sancionar los delitos muestren preocupación por dar con los responsables, y denunciaron el atentado contra uno de sus agremiados, Carlos Alberto Moctezuma. Pero es solo un hecho más de los muchos que ocurren a diario y que van desde las amenazas, las extorsiones, los cobros de piso a negocios o el asesinato.
El ya ex gobernador, hoy diputado federal Cuauhtémoc Blanco, se fué como la chacha, por la puerta trasera, no dió la cara a los morelenses, ni un adiós. Dejando a la entidad en un ambiente de descomposición e ingobernabilidad, eso sí, en los primeros lugares nacionales en feminicidios, homicidios, extorsiones, y robo de autos con violencia; por algo durante éstos seis años Blanco Bravo ocupó permanentemente el último lugar, valuado como el peor gobierno estatal en el país.
Magno problema le hereda a Margarita González Saravia, quien asume cargo el próximo primero de octubre; los abogados piden al Congreso local incrementar el presupuesto a la Comisión Estatal de Seguridad para que incremente el número de policías y cambiar de estrategia. García Bravo dijo que ni el Mando Único, ni el coordinador dieron resultado, por lo tanto, debe pensarse en una mejor estrategia, que combata la impunidad que llega al 97 por ciento.
La desgracia en Morelos comenzó, con fuerza, a partir del 2009, cuando las fuerzas federales abatieron a Arturo Beltrán Leyva, quien era la cabeza del grupo criminal "Los Rojos" que con su deceso, se dividieron, dando vida a "Guerrero Unidos" en las torres departamentales "Altitud", en Cuernavaca. Son 15 años de de derrame de sangre y no se le ve fin al clima de violencia.
Por demás, preocupante el escenario, no sólo en Morelos, es en toda la República; también la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, asumirá el poder con escalofriantes cifras de delitos de alto impacto.