La relación SNTE y gobiernos
La visita reciente y el mensaje que dejó la gobernadora electa, Margarita Gonzalez Saravia, en las oficinas de la Sección 19 del SNTE, en la que se reunió con la dirigencia nacional y local encabeza por Alfonso Cepeda Salas y Joel Sánchez Vélez, respectivamente, simboliza el estado prevaleciente en las relaciones que la representación formal del magisterio nacional y estatal registra, de cara al inicio de una nueva era en el ejercicio del Poder Público en Morelos y en el país.
Los antecedentes en la construcción de esta estrecha relación entre ambas partes se remontan al tránsito del sexenio del presidente López Obrador y al respaldo incondicional que recibe del SNTE y del magisterio, y tiene un punto clave en la decisión de Cepeda Salas para apoyar sin rodeos la precandidatura y candidatura de Claudia Sheinbaum para la Presidencia de la República, a través de la Asociación Civil “Fuerza Turquesa” que preside Sonia Rincón Chanona, y con la que más de 60 partidos con registro local y organizaciones sociales y políticas en todo el país se suman.
A partir de esos acuerdos, comienza a construirse un diálogo político que entre otros incluye la postulación de Cepeda Salas al Senado por Morena, así como a una diputación federal para Rincón Chanona, y que en el caso de Morelos pasa por la concreción de una coalición para que el Partido Nueva Alianza Morelos respalde la candidatura de González Saravia a la gubernatura y la postulación como candidato de Morena por el V Distrito Federal del diputado local aliancista Agustin Alonso Gutiérrez, todos avantes en las elecciones del pasado dos de junio.
Previo a la reunión del jueves pasado, en lo que ya es un hecho histórico sin precedente ya que nunca antes un gobernador había estado en la casa del magisterio morelense, tanto la presienta electa Sheinbaum Pardo como el presidente López Obrador, habían agradecido sentidamente al magisterio nacional y a su sindicato, el respaldo reflejado en las votaciones federales. Incluso, el mandatario nacional envío sendos mensajes a través de la octava Sesión del Consejo Técnico Escolar del pasado 28 de junio, reiterando el agradecimiento a los maestros del país hacia su gobierno y hacia la presidenta electa, y adelantó que “más y mejores cosas para la educación y para el magisterio del país se darán en los próximos años de gobierno de la 4T”.
Lo que por años había estado buscando el SNTE a través de su brazo político de “Fuerza Turquesa” y los partido locales aliancistas, para asumir posiciones de ejercicio de poder en el gobierno, por fin se concreta con un nivel no registrado desde casi dos décadas y esto seguramente se verá reflejado en las próximas semanas, al integrarse el gabinete ampliado del gobierno federal 2024-2030 y para la próxima administración del gobierno estatal para el mismo periodo.
Y es que este escenario que derivaría de la excelsa relación entre el SNTE y las futuras administraciones del gobierno, pasa también por el reconocimiento oficial hacia el papel que el magisterio ha jugado como protagonista para la buena marcha del modelo de la Nueva Escuela Mexicana, pero incluso, por el aliento que se requiere para concretarlo en la práctica, ante las debilidades de la gestión y la imposición que se ha pretendido hacer desde las autoridades educativas de la SEP y en los gobiernos de los estados, que no logran entender que lo que se requiere para alcanzar el éxito son dos cosas: convencer a todos los agentes activos que rodean la escuela y la educación pública para que asuman su papel y participen, y acertar en la implementación de un programa nacional de capacitación y actualización eficiente.
De la visita de la próxima gobernadora a la Sección 19 y de los mensajes pronunciados por ella y por los líderes del SNTE, se puede advertir con claridad la decisión de trascender juntos en un diálogo y acuerdos que permitan superar rezagos prevalecientes en materia laboral y prestacional del magisterio local, muchos de ellos acumulados por la intransigencia de las autoridades del gobierno y educativas desde el año 2013, en que se cierra la negociación local entre la Sección 19 y el IEBEM.
Se advierte también la decisión de terminar con la burocracia imperante en el sector educativo y la inminente corrupción que galopa en muchos de los procesos y oficinas del sector educativo. De aquí se advierte el final o el cierre de la Unidad del Sistema para la Carrera de las y los Maestros, una exigencia firme que desde la dirigencia nacional del SNTE se ha dado ante los múltiples casos documentados y las denuncias de profesores de todo el país.
Tal ves, y si la voluntad política alcanza, estaremos en la antesala por primera vez, de que se abran procesos de fiscalización sobre las múltiples irregularidades perpetradas en la administración del IEBEM y se sancione a los responsables, a ver…