Este martes, el presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, declaró la ley marcial en un sorpresivo discurso televisado el martes por la noche, acusando al principal partido de oposición, el Partido Democrático, de simpatizar con Corea del Norte y de llevar a cabo actividades contra el Estado.
Aunado a lo anterior, esta es la primera vez desde 1980 que un presidente surcoreano declara la ley marcial, una medida que fue tomada en medio de un conflicto político creciente.
Además, justificó su decisión como una medida necesaria para proteger la seguridad y la estabilidad del país, señalando que las acciones del Partido Democrático, que tiene mayoría en el parlamento, habían "paralizado los asuntos estatales" y "convertido a la Asamblea Nacional en una guarida de delincuentes".
Según Yoon, la ley marcial era esencial para erradicar las "fuerzas antiestatales pro-Corea del Norte" y garantizar la preservación de las libertades y la democracia en el país.
No obstante, esta decisión generó una rápida reacción en el parlamento. Los legisladores surcoreanos votaron en contra de la medida, con 190 votos en contra de los 300 miembros del parlamento, revocando la ley marcial.
Aunque la votación unánime no aclaró de inmediato las implicaciones jurídicas, la ley surcoreana establece que el presidente debe cumplir con la decisión del parlamento.
El decreto de ley marcial, según fuentes como Yonhap y Reuters, prohíbe diversas actividades políticas, incluidas huelgas y manifestaciones, e incluso autoriza arrestos sin orden judicial. Los opositores y algunos ciudadanos expresaron su sorpresa y condena ante esta medida, calificándola de inconstitucional y una amenaza a la democracia surcoreana.
Cabe recordar que, el presidente Yoon, quien asumió el cargo en 2022 como líder del Partido del Poder Popular, ha enfrentado un entorno político complejo, marcado por tensiones internas y externas, especialmente con Corea del Norte.
Por último, la reciente declaración de ley marcial ha aumentado la presión sobre su gobierno, que ya lidia con la caída de su popularidad debido a varios escándalos y conflictos políticos internos.
¿Qué es la ley marcial?
La ley marcial es una medida excepcional que otorga a las fuerzas militares el control del gobierno y la administración de justicia en situaciones de emergencia, suspendiendo temporalmente las leyes civiles y ciertos derechos individuales.
De acuerdo al Código de Líber, la ley marcial implica que la autoridad militar asume el control del territorio y la administración local, reemplazando el régimen civil con uno de carácter militar.
¿Para qué sirve y como funciona la ley marcial?
En el contexto de un conflicto armado o una ocupación extranjera, la ley marcial también implica la suspensión de las leyes civiles y penales, sustituyéndolas por un régimen militar. Sin embargo, este régimen debe regirse por principios fundamentales de justicia, honor y humanidad, ya que, como señala el Código de Líber, el soldado, al tener "el poder de las armas contra los desarmados", está obligado a actuar con ética.
A pesar de su naturaleza drástica, el Código de Líber establece que el derecho civil y penal puede continuar su curso en territorios bajo ley marcial, a menos que el poder militar de ocupación decida interrumpirlo.
La ley marcial se implementa generalmente en situaciones de emergencia nacional, como guerras, rebeliones o desastres naturales, y otorga al régimen militar facultades extraordinarias para mantener el orden público. En tales circunstancias, las fuerzas armadas y policiales pueden imponer toques de queda, arrestos sin supervisión judicial y otras medidas excepcionales, incluso a costa de la suspensión de ciertos derechos civiles y libertades para controlar la situación y preservar la seguridad del país.
Con información de CNN Español y El Universal
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