Este jueves, el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela (TSJ) confirmó oficialmente los resultados de las elecciones del pasado 28 de julio, consolidando así la victoria de Nicolás Maduro para un tercer mandato presidencial.
Lo anterior, luego de que, el TSJ, dominado por magistrados afines al chavismo, declaró la validez del proceso electoral, pese a las numerosas controversias que han surgido tanto dentro como fuera del país.
Por su parte, la presidenta del TSJ, Caryslia Rodríguez, una destacada figura chavista, lideró el peritaje judicial que avaló los resultados. Sin embargo, la declaración del TSJ no ha logrado aplacar las críticas. La oposición venezolana y varios líderes internacionales han denunciado irregularidades y fraudes en el proceso, señalando la falta de imparcialidad del tribunal.
Hay que resaltar que, los resultados han causado episodios de violencia y protestas, sobre todo en el extranjero, donde la comunidad venezolana ha manifestado su rechazo a la reelección de Maduro. A pesar de esto, el Gobierno de Venezuela ha dado por cerrado el capítulo de la denuncia de fraude, con el ministro de Relaciones Exteriores, Yván Gil, afirmando que la sentencia del TSJ pone fin a las acusaciones.
Al respecto, países como México, Colombia y Brasil han mantenido una postura neutral, lo que ha generado críticas por lo que algunos consideran una actitud "tibia" frente a la situación.
Con información de Índigo
*ARD