1.El sindicalismo está en la inercia colectiva, al menos los sindicatos charrísimos más grandes y corrompidos del país: el de los Electricistas (SUTERM), el de los Petroleros, el de los Ferrocarrileros, el de los Telefonistas y el de los Maestros. Cada uno con su ejemplar dirigente.
A sus escasos 90 años, Víctor Fuentes del Villar gana una vez más –lleva 25 años- la dirigencia del SUTERM que dirigirá hasta el 2031, cuando cumpla 97. Hernández Juárez se ha reelecto para el de los TELEFONISTAS después de 48 años de dirigirlo. Ricardo Aldana, un allegado a Romero Deschamps, dirigente de los PETROLEROS modelo de corrupción, se ha agandallado la dirigencia de esos trabajadores violentando voluntades mayoritarias.
Todos ellos han adelantado su reelección antes que el Congreso Federal entrante procese la reforma que impedirá la reelección en todos los ámbitos. Esas organizaciones tienen que ser obligadas a dar cuentas de los dineros manejados. Sus dirigentes se han enriquecido impunemente con inmensas fortunas alegando legalidad establecida. Olvidan, a propósito, que legalidad no equivale a legitimidad.
2. - MORENA comete flagrantemente abusos contra su militancia lo que resulta una traición. Entregó cargos importantes a panistas recalcitrantes haciéndolos sentir importantes. Germán Martínez y Manuel Espino, por ejemplo. No mencionemos el ridículo y vergonzoso caso de Lily Téllez.
Ahora repite nombrando Senador al Secretario General del SNTE, Diputado Federal a Cuauhtémoc Blanco y a Sergio Mayer. Así que Electricistas, Telefonistas, Petroleros y Maestros siguen bajo el charrismo sindical corrupto. ¿Cuándo se van a liberar? ¿Dónde queda la 4ta. Transformación con estos hábitos corrompidos en estos Sindicatos?
Mario Delgado será el próximo Secretario de Educación Pública, no sabemos por qué. Creemos que solo es un acto de lealtad o de agradecimiento, vaya usted a saber.
3. -Ya cunde una protesta generalizada por la Impunidad que disfruta Germán Larrea. Sus delitos evidentes han causado muerte y destrucción. Se cumplen 10 años de la contaminación del Río Sonora que ha perjudicado a 8 municipios, 9 si consideramos a Hermosillo. No ha recibido ninguna sanción por el daño al Medio Ambiente. Se piensa ya en la construcción de Hospitales con especialidad Oncológica para atender a los casos de cáncer ya registrados. Y se avizoran muchos más dada la contaminación del agua que utiliza la gente de esos pueblos. Hay un Hospital a medio construir en Ures, sólo en obra negra que ya ha sido abandonado.
Súmenle las huelgas de las Minas de Sombrerete, Zac., Cananea, Son. y Taxco, Gro. que cumplen ya 17 años (¡!) ¿Puede usted imaginarlo? ¿Qué clase de empresario es éste que abandona a sus trabajadores que han solicitado legalmente mejoría en sus prestaciones?
Preguntemos respetuosamente, como se acostumbra, aunque no sea cierto, ¿Hay impunidad para esta clase de individuos C. Presidente? ¿No va a ser obligado a pagar los salarios caídos y las reinstalaciones al trabajo de los huelguistas? ¿Hasta cuándo? ¿La 4ta. Transformación es sólo de reformas que no afecten a los explotadores?
4. Falta resolver lo de CALICA la empresa gringa que ha despedazado buena parte de la Costa sacando material rocoso que se llevaba a su país para construir carreteras. No hay otra salida más que la expropiación, la nacionalización pues de todo ese terreno. Necesitamos al General Cárdenas.
Y las mineras canadienses que ni siquiera pagaban impuestos. Lo peor es que los mismos gobernantes (Salinas, Zedillo, Fox, FeCal y Peña Nieto) les entregaban nuestros terrenos y riquezas. Basta de tanto saqueo.
En definitiva, lo que falta, dicho en términos populares, es hacer realidad la Justicia. No a la explotación, no al saqueo de nuestras riquezas, no a la entrega de nuestros recursos. Esa ha sido la maldición de nuestros países, sus riquezas naturales, sus recursos. Revisen todos los de nuestra Amerindia y encontraremos que cada uno de ellos tiene para dar y prestar. No se diga la sacrificada África.
Esa es la diferencia en cuanto a los multimencionados Proyectos de Nación. O bien, conservamos nuestra riqueza natural o bien la entregamos a la depredación extranjera que no mide nunca el impacto social ni ambiental que provoca en los países que invade. Solo les interesa la ganancia que obtienen a costa de explotar nuestra mano de obra, contaminar nuestros ríos y tierras y saquearnos impunemente.