La era digital ha sido fundamental para la tramitación de documentos ordinarios, pues el avance y desarrollo de las nuevas tecnologías han permitido cruzar fronteras y crear nuevas vías de comunicación, lo cual sin duda representa grandes beneficios, pero también constituye enormes retos.
El internet es una herramienta que permite conectar de forma inmediata a las personas con el resto del mundo. Por otra parte, la digitalización brinda el acceso a cualquier tipo de información, desde el lugar en donde se encuentre uno.
Por esta razón, el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas aprobó una resolución en la que se considera que el acceso a Internet es un derecho básico de todos los seres humanos.
Y es precisamente por la existencia de esta herramienta, que la vida en general tuvo que adaptarse; es decir, ha cambiado el comercio, la educación, la salud e incluso la forma de relacionarnos afectivamente, debido a que todas estas actividades ahora se pueden realizar en línea digital.
Por ello, en México fue necesario crear, socialmente hablando, el concepto de “Gobierno Electrónico”, mismo que incluye aquellas actividades basadas en las modernas tecnologías informáticas, que el Estado desarrolla para aumentar la eficiencia de la gestión pública.
Entre estas mejoras se incluye la actualización de la base de datos del registro civil, que antes solo obraban en libros físicos. Específicamente el caso de las actas de nacimiento, documento que es sumamente importante para para la sociedad, pues representa un registro permanente y oficial sobre la existencia de una persona, aunado a que brinda el reconocimiento jurídico de la identidad.
El registro de nacimiento constituye un derecho fundamental, no obstante cuando estos trámites se realizaban en libros físicos, fueron muchos los casos en los que se realizaban de forma incorrecta, pues no se verificaba la veracidad de la información vertida en el acta, cometiendo errores ortográficos en el nombre de las personas registradas o equivocación del año de nacimiento, etcétera. Lo anterior nunca advirtió que estas equivocaciones causarían afectaciones en la identidad de la persona, generando en consecuencia problemas en lo sucesivo en trámites laborales, escolares entre otros.
A manera de ejemplo, cuando una persona desea realizar un trámite de pasaporte y el año de nacimiento es erróneo, no podrá obtener este documento oficial de viaje. Lo mismo sucede ante el cobro de un seguro de vida o una pensión, pues al existir en los registros digitales información diferente a la plasmada en los libros de registro, estos trámites serían impedidos hasta en tanto se resuelva y sea aclarado; es más, en algunos casos hasta obtener resolución vía judicial.
Pero bueno, la digitalización de las actas de nacimiento ha avanzado gradualmente, lo que permite adquirir estos documentos de forma inmediata y que beneficia a la sociedad; sin embargo, con este avance se evidenciaron todas aquellas inconsistencias suscitadas desde hace años atrás. Por esta razón, si te encuentras en este supuesto, regulariza tu registro con la debida anticipación y no hasta que te veas obstaculizado por no hacerlo en su tiempo y tengas como resultado la traba de un derecho o trámite.