Sería bueno conocer qué priístas morelenses acudieron a la Asamblea que se autoorganizó su dirigente Alejandro Moreno para reelegirse feliz de seguir manejando los millones de las prerrogativas.
El interfecto proclamó un discurso incendiario y cuasi revolucionario hablando de la transparencia y de las condenas a los malos priístas culpables del asesinato de Luis Donaldo Colosio. Creo que van a juzgar a Salinas de Gortari.
Surgen muchas preguntas y cuestionamientos a los aún “militantes” de esta agrupación. ¿Ese es el partido que quieren conservar? ¿Serán, alguna vez, en sus desordenadas existencias, capaces de alguna autocrítica? ¿Llegarán a experimentar un poco de vergüenza, de pena? ¿Van a continuar en su sempiterna arrogancia y presunción? ¿Qué pueden presumir? ¿Sus acostumbradas cadenas de corrupción? ¿Sus devaluaciones sexenales? ¿Sus asesinatos que continúan impunes? ¿Sus represiones y masacres al pueblo en cuerpos de campesinos, obreros, estudiantes? ¿Sus 68s, sus junios del 71? ¿sus Aguas Blancas? ¿sus Ayotzinapas?
O, bien… ¿su traición histórica a sus propios principios ideológicos? ¿Su prostituida entrega a los panuchos? ¿El que ni siquiera hayan presentado algún candidato a la presidencia aceptando tácitamente su sumisión al Pan y su ausencia de recursos humanos? ¿El haber renunciado a los postulados de la Revolución Mexicana para entregar las riquezas de la nación a manos extranjeras? ¿Votar todo lo que sus presidentes indicaran o se les antojara cumpliendo así como empleados de las oligarquías dominantes?
Justificaron el asalto al pueblo aceptando sin mayor problema, el FOBAPROA. Aprobaron la entrega de las empresas paraestatales a los cuates del presidente enriqueciéndolos sin límites y propiciando el robo y la corrupción. No chistaron con la venta de los Ferrocarriles. Nunca aprobaron el menor incremento a los salarios mínimos. Festejaron soezmente el aumento al IVA. Atacaron a los indígenas zapatistas de Chiapas provocando el asesinato de mujeres y niños en Acteal.
¿Y qué nos pueden decir de sus gobernadores sátrapas y rateros? Permítanme recordarles a Rubén Figueroa graduado como un represor y criminal. A Arturito Montiel que hasta chalets y departamentos se compró en Francia y España y pregonaba que los Derechos Humanos no eran para las ratas. Cuenten por favor a quienes están ya en la cárcel o en proceso de juicio.
Lo realmente extraño es que no haya de entre sus filas algún ente crítico de esa conducta partidista o de gobierno. Entendían que debían quedarse calladitos e inmóviles, sometidos, sumisos, en plena abyección, sin ningún asomo de dignidad permitiendo a sus dirigentes tratarlos con absoluto desprecio. Los críticos serios que salieron a escena reclamando un cambio de orientación fueron tratados como delincuentes, como traidores, como sinvergüenzas.
Tenemos que señalar a Cuauhtémoc Cárdenas, a Porfirio Muñoz Ledo, a Ifigenia Martínez, a Andrés M. López Obrador que decidieron salir de las filas para fundar otro partido con nuevas miras. No conozco morelenses que hayan mostrado alguna vez una posición crítica solo estaban a la espera de hacer lo que les indicaran subyugados por sus propias autoridades a quienes concedían anticipadamente toda la razón.
Necesitamos una oposición seria que se maneje con argumentos, que proponga debates políticos, económicos y hasta culturales si es posible. Que se tenga en suficiente aprecio para que no espere autorización para hablar. He visto, con mis propios ojitos y escuchado con mis propios oídos cómo maltrataban a compañeros míos de ascendencia priísta y cómo ellos sólo inclinaban la cerviz. Qué pena…
Alejandro Moreno se ha salido con la suya. Lamento mucho que el resto no solo acepte este desaguisado sino hasta que lo aplauda. Ahora sí y dadas las circunstancias puedo decirles: con su PAN se lo coman.
LA FRANCIA INSUMISA. – Permítanme estos renglones para celebrar el triunfo de la Izquierda francesa que detuvo el avance de la Ultraderecha más espantosa de que se tenga memoria. Permítanme también recordar que un día de los años 80s llegamos al París, de mis culturosos y afectuosísimos recuerdos, encontrando y sumándonos a la festividad popular por el triunfo de Francois Miterrand. No quiero referirme por hoy a la Inglaterra de los piratas saqueadores que hizo ganar a los Laboristas pero también es algo digno de aplaudirse.
Las Izquierdas del mundo pueden detener la avalancha criminal de las Derechas asesinas. En realidad, esto es una lucha por la Vida. Los neoliberales del mundo buscan implantar regímenes de terror y de muerte para los pobres, para los migrantes, para los necesitados. El imperialismo yanqui ha hecho cómplices a los alemanes, a los italianos, a los sicarios israelíes, en busca de una Europa que obedezca y se afilie a sus intereses. Aquí en América ya cuenta Milei de Argentina, con Bolsonaro de Brasil, con el PRIAN de México y con las oligarquías de nuestros países que pretenden continuar depredando nuestros recursos.