Han aumentado la saña y el número de feminicidios perpetrados con arma de fuego, mediante agresiones desde motocicleta en movimiento. Ya son 46 mujeres que mueren bajo una lluvia de balas, de las 81 que han sido víctimas de la violencia. Ha habido un significativo aumento con relación al año pasado, en el que por estas fechas iban 72.
Esto lo afirmó Susana Díaz Pineda, representante del Centro de Derechos Humanos Digna Ochoa, quien agregó que mientras la violencia contra las mujeres crece, la Fiscalía General sigue maquillando cifras y carece de estrategias para dar con el paradero de los crímenes.
“Son 81 feminicidios los que tenemos documentados, y de esos son 46 las mujeres que han sido asesinadas con arma de fuego”, puntualiza Díaz Pineda, por lo que constituye una alerta no solo para las mujeres, sino también para las autoridades.
No obstante, hay otras prácticas para consumar los asesinatos de mujeres que se están presentando: personas a bordo de motocicletas están disparando contra sus víctimas para asesinarlas.
“Es un patrón de actuación que se está repitiendo en este tema del feminicidio y hay que poner mucha atención, porque hay muchas armas en el estado”, y cuestionó: “¿De dónde vienen esas armas? Porque con armas se les está quitando la vida a las mujeres”.
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“Lo grave no es solamente la violencia feminicida, que termina con la vida de las mujeres, sino que hay una autoridad omisa, que termina con ojos ciegos para no ver lo que estamos padeciendo las mujeres y a nadie parece importarle esta situación”.
A la representante de los derechos humanos del Centro Digna Ochoa se le planteó que la Fiscalía del estado ha ponderado los éxitos que ha tenido con la captura de peligrosos feminicidas en la región oriente de la entidad y que, incluso, ha colaborado con autoridades del Estado de México para su detención.
Ante esto, fue contundente: “Siguen siendo llamaradas de petate, lamentablemente. Estamos viendo que en la Fiscalía hay seis fichas de búsqueda y localización de feminicidas. Hay que recordar a los feminicidas de Cuautla, son al menos cinco, que mataron a una mujer, le prendieron fuego cuando estaba viva”.
Y la indignación: “Hay que decirle al Fiscal que deje de maquillar cifras y que dé resultados. Estamos teniendo una política cero en materia de atención al feminicidio, de trabajo en los municipios, no se están combatiendo, no se están clasificando como debe ser. Se están ocultando cifras”.
Cuestionó la labor de las autoridades no sólo por los feminicidios y la ausencia de acciones para prevenir la violencia contra las mujeres, sino el hecho de que no están combatiendo tampoco el tráfico de armas que los asesinos están utilizando.