La escuadra dirigida por Nicolás Larcamón tuvo un primer tiempo complicado, pues los rivales no dejaban de atacar su portería y aunque no concretaban nada se mostraban muy peligrosos, pero en el minuto 26 Maxi Araújo realizó un disparo potente el cual se estrellaría en el poste para posteriormente ser metido en la portería por el defensa Carlos Salcedo de manera accidental, poniendo el marcador a favor del Puebla.
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Posterior al primer gol, los poblanos se sintieron más cómodos y asi comenzaron a ser más peligrosos, y en el minuto 46 Julián Quiñones trompicó a Gularte en el área universitaria provocando un penal que Pablo Parra aprovecharía para poner el 2-0 antes de ir a medio tiempo.
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En el segundo tiempo Tigres hizo sus ajustes y mejoraron bastante, pues tuvieron más oportunidades de gol aunque no tuvieron la contundencia que buscaban sumado a que el Puebla supo defender su ventaja, hasta que al minuto 86 el árbitro marcó un polémico penal sobre el delantero paraguayo Carlos Gonzáles el cual André Gignac puso en el poste dejando ir su oportunidad para buscar el empate, terminando el partido con la victoria para los camoteros.