Los candidatos de todos los partidos que compiten por las alcaldías de la entidad acudieron al llamado de la iglesia Católica para firmar el Compromiso por la Paz Morelos, reconociendo el duro diagnóstico planteado por monseñor Ramón Castro Castro, y comprometiéndose a cumplir institucionalmente con la parte que como autoridades les tocará asumir en el combate a la delincuencia.
Para la firma del Compromiso, se dispusieron mesas en distintos puntos de la Catedral, y en la que el Obispo expuso su mensaje, firmaron los abanderados a la alcaldía de Cuernavaca, así como de su zona conurbada.
En el caso del candidato de Redes Sociales Progresistas, Eder Rodríguez Casillas, quien compite por Jiutepec, afirmó que el panorama de inseguridad y violencia que vive Morelos es una realidad y que en sus recorridos por colonias y reuniones con grupos sociales, el de la inseguridad constituye el principal reclamo.
Por su parte, Ale Flores, de la alianza Sigamos haciendo historia, citó la percepción de más del 80 por ciento de inseguridad que la gente tiene en Cuernavaca, que está entre las cinco ciudades más inseguras del país. No obstante, agregó Ale Flores, el Obispo también ha planteado a la sociedad la alternativa democrática de solucionarlo mediante el voto el dos de junio, castigando a quienes habiendo tenido la oportunidad y, sobre todo, la responsabilidad de hacer frente al problema, no lo hicieron.
Lee también: Elecciones en municipios y congresos locales, blanco del cr1m3n organizado
En tanto, el abanderado de Dignidad y seguridad por Morelos, vamos juntos, José Luis Urióstegui Salgado, afirmó que ya el Obispo Castro Castro en varias ocasiones, al frente de la iglesia católica, ha encabezado esfuerzos por la seguridad y los llamados a autoridades a ofrecer resultados. Consideró que parte del problema para enfrentar la violencia radica en la falta de coordinación institucional y confía en que, después del cambio de autoridades, haya acuerdos y trabajo conjunto entre los órdenes de gobierno. Se comprometió a sumar su mejor esfuerzo por la seguridad y la paz.
La Catedral estaba llena de feligreses, lo mismo que de ciudadanos que participaron en la Caminata por la paz, y que se congregaron en la sede de la Diócesis, a la que los contingentes, lo mismo que los párrocos de las distintas iglesias que participaron, fueron llegando y asumieron su lugar, flanqueando al Obispo, en el templete.
En otras mesas, por regiones, como la oriente y la sur, los abanderados de las distintas fuerzas hicieron lo propio: asumir el diagnóstico de la difícil realidad que enfrenta Morelos en materia de inseguridad y que se traduce en la angustia, dolor y miedo de la gente, pero también a aportar su mejor esfuerzo para que Morelos no siga padeciendo la ola delincuencial.