Unos 50 mexicanos condenados a muerte en Estados Unidos; uno es morelense

La Confederación Internacional de Morelenses y Migrantes Mexicanos, reporto que al menos 50 mexicanos están condenados a muerte en Estados Unidos

La Confederación Internacional de Morelenses y Migrantes Mexicanos, reporto que al menos 50 mexicanos están condenados a muerte en Estados Unidos. Uno de ellos, es morelense. Se trata del originario de Cuernavaca, Víctor Manuel Miranda Guerrero.
Según dio a conocer el presidente de la Confederación, Pablo Antonio Castro Zavala, el paisano morelense está preso desde hace seis años en la prisión Donovan de San Diego, donde enfrenta la pena de muerte.
En varios o en casi todos los casos, los delitos tienen que ver con homicidios y asaltos, se registran en California y Texas, solo hay un caso o dos en Nevada, los que enfrentan la pena de muerte”, detalló.
Pablo Castro Zavala Indicó que están gestionando la posibilidad de que su madre, persona de la tercera edad, pueda ir a visitarlo.
Además de evitar con la mediación del Vaticano y el cuerpo diplomático de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), la aplicación de tan lamentable sentencia.

 

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EDGAR TAMAYO
El presidente de la Confederación Internacional de Morelenses y Migrantes Mexicanos, Pablo Antonio Castro Zavala, recordó que otro morelense, Édgar Tamayo Arias fue ejecutado con inyección letal, en la prisión de Huntsville, Texas; tras vivir un largo proceso, y fue sentenciado por el asesinato de un policía en Houston, en enero de 1994
El mexicano Edgar Tamayo Arias nació en Miacatlán y llegó a EU a los 18 años. Estuvo un tiempo en California y en 1993 se trasladó a Texas. Fue detenido junto con su amigo Jesús Mendoza,  el 31 de enero de 1994 al salir de una fiesta. Los metieron a una patrulla por un supuesto robo, el policía hizo una escala y cuando regresaba al vehículo recibió tres disparos.
El arma con el que fue asesinado el policía apareció en la parte trasera de la patrulla pero no tenía huellas dactilares de Tamayo ni de su acompañante. Le realizaron la prueba de “Harrison” para localizar residuos de explosivos y el resultado fue negativo.
Sin embargo, Tamayo aceptó haber matado al policía por no dejarlo hablar con su esposa. Al no dominar el inglés, no pudo comprender y contestar correctamente los cuestionamientos que le hacían, tampoco recibió asesoría consular, a la que por ley tiene derecho.