Industria de la construcción opta por trabajar con ayuntamientos o en Guerrero

Gobierno de Cuauhtémoc pone condiciones incumplibles

La Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) delegación Morelos está optando por trabajar con los ayuntamientos o centrar sus actividades en la reconstrucción de Guerrero, porque el gobierno estatal, a cargo de Cuauhtémoc Blanco Bravo, impone condiciones que no pueden cumplir y han tenido que migrar en busca de mejores oportunidades.
Eso lo afirmó el Presidente de la CMIC Morelos, Armando Núñez Iragorri, quien puntualizó que para cualquier obra el gobierno estatal no está brindando los adelantos correspondientes y, más aún, quiere pagar completo hasta terminadas las labores y ya revisadas. Evidentemente, consideró el líder empresarial, los constructores no estamos en condiciones de financiar las obras que planea realizar la administración estatal. Somos empresarios, no bancos, enfatizó.
Esos términos para la adjudicación de obras del gobierno estatal son imposibles, particularmente para los pequeños constructores en obras de 10 ó 20 mil pesos, porque no están en condiciones de financiar los trabajos varios meses sin recibir un ingreso por ello.
Por tanto, agregó, han optado por trabajar con los municipios, aunque muchos de ellos, junto con el gobierno estatal y hasta el federal están adoptando ese sistema en el cual es el constructor el que va financiando la obra y sólo hasta el final, después de entregada y revisada, se programa e pago incluso tres meses después de terminadas las labores.
Incluso ese mismo esquema lo están utilizando los privados que contratan obra, pero en estos casos hay dos diferencias: van pagando de acuerdo al avance de los trabajos, y cuando se trata de liquidar las labores porque ya fueron terminadas, no ponen plazos ni retrasan las retribuciones al constructor.
En el antecedente de que durante esta administración estatal no se ha hecho una gran obra pública, se cuestionó a Núñez Iragorri si el adeudos del gobierno estatal con los constructores, dijo que no hay muchos de sus 120 afiliados trabajando con las autoridades locales, están colaborando más con los municipios y con el gobierno federal y con ellos los pagos han fluido muy bien.
“Para los constructores es muy difícil financiar una obra completamente”, destacó.
Además de la alternativa de trabajar con los ayuntamientos, los empresarios de la construcción han encontrado una ventana de salvación al migrar a trabajar en las tareas de reconstrucción en el estado de Guerrero, donde ellos y su maquinaria lo mismo son requeridos para las tareas de demolición de edificios dañados, que para la remoción de escombros.
El Presidente de la CMIC afirmó que si bien han sido bien recibidos en el estado de Guerrero, tener que migrar para encontrar mejores oportunidades no ha sido sencillo, puesto que se trata de los traslados, por una parte, pero también porque los costos de los materiales en aquella entidad se han incrementado considerablemente.
Sin embargo, ante la falta de oportunidades para la industria de la construcción en Morelos y particularmente con las condiciones que impone el gobierno, ya más del 20 por ciento de los afiliados a la Cámara han emigrado a realizar trabajos en Guerrero.