Una disculpa pública del Fiscal Uriel Carmona, es la exigencia de Iraís Brito Pérez y Luz de Alba Pérez, después de ser falsamente acusadas del robo de un bebé, lo que las llevó a estar en prisión once meses al final ser absueltas por las autoridades judiciales.
Que realicen un trabajo profesional y no capturen inocentes sólo por mejorar sus cifras, exigió Iraís al Fiscal Carmona Gándara, pues ella fue detenida frente a su hijo menor y no les importó la suerte del pequeño, que impotente vio cómo se llevaban a su madre.
No menos terrible fue la situación de Luz de Alba Pérez, quien destacó que fue capturada en su trabajo, una maquiladora, en donde tenía el reconocimiento de sus superiores y compañeros de trabajo por la calidad de labor. Dijo que desde que comenzó este problema su salud se ha deteriorado. El trauma de su detención es indescriptible, dijo, pues no duerme y todo el tiempo tiene miedo.
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Explicaron las razones de su encarcelamiento: una joven de la Ciudad de México dejó su casa y llegó a Cuernavaca, sin que sus padres lo supieran. Decía estar embarazada. Pronto encontró empleo en la Plaza de la Tecnología, en pleno centro, y fue Luz de Alba quien le ofreció quedarse en su casa para apoyarla.
Sin embargo, como ella dejaría su casa para mudar su residencia, le pidió a la joven que desocupara el inmueble. Nunca, aseguró, tuvieron indicios de que estuviera embarazada ni vieron al bebé. De eso dieron testimonio tanto los compañeros de trabajo de la joven como los vecinos.
Narraron cómo la joven las acusó de haberle quitado a su bebé, y mostró una foto que en realidad tomó de internet diciendo que era el suyo.
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Después de las supuestas investigaciones de la Fiscalía a cargo de Uriel Carmona, fueron detenidas y encarceladas once meses, en tanto que la joven fue interrogada, se le examinó incipientemente porque se negó a una revisión profunda, descubriéndose que sí había parido no hacía mucho, pero nada se sabía de su hijo.
Al final, mientras dos juezas creyeron en la inocencia de Iraís y Luz de Alba, la tercera seguía creyendo en la culpabilidad de ambas.
Se tiene conocimiento de que la joven volvió a la ciudad de México y que está con sus padres, pero de su criatura se desconoce aún el paradero.
Pidieron se proceda contra la joven capitalina que las acusó de robarle su bebé falsamente, y exigieron también la reparación del daño, después de 11 meses en la cárcel injustamente, por las afectaciones físicas al privarlas de la libertad, así como las psicológicas y sociales, pues ahora muchos las señalan en las calles.
Al Fiscal Uriel Carmona Gándara le exigieron disculparse públicamente y reconocer su inocencia, destacando que es mejor que persiga a los verdaderos delincuentes y no a mujeres trabajadoras que por la mala investigación han atravesado un calvario.