Aunque en el concierto electoral concurrente con la elección presidencial, Morelos no suele representar mayor importancia para las fuerzas políticas nacionales y para el gobierno de la república en turno, la del 2024 se va a configurar en un escenario donde el morbo jugara su papel. Aquí la cuestión será definir si tras un gobierno fallido como el del exfutbolista Cuauhtémoc Blanco, quién fue impulsado por el Partido Encuentro Social en el año 2018, Morena es capaz de ganar por primera vez la gubernatura.
Y es que, como se ve, es muy probable que la carrera por la máxima posición de elección popular del estado tenga finalmente mayor competitividad entre los aspirantes de las distintas fuerzas políticas, aunque en el caso del partido Morena, primero deberán resolver su disputa interna.
Por el Frente Amplio por México su mejor carta es el senador Angel García Yáñez y por el Partido Nueva Alianza Morelos iría el diputado Agustín Alonso Gutiérrez, faltando los abanderados de Movimiento Ciudadano y alguno más de los varios partidos locales que subsisten.
Y da la casualidad que, en el caso de los morenistas, así como se resolvió en una carrera parejera la candidatura presidencial entre la ganadora de las encuestas, Claudia Sheinbaum por sobre Marcelo Ebrard, es muy probable que aquí se defina entre Margarita González Sarabia y Víctor Mercado, a los que podrían hacerles comparsavarios más ya que la lista de aspirantes es larga, entre los que se cuentan los alcaldes de Jojutla y Jiutepec, Juan Angel Flores y Rafael Reyes, respectivamente, así como la petista Tania Valentina Rodríguez, entre otros.
Así, para los morenistas Morelos representa un gran reto. Con la ausencia de la omnipresencia de su guía moral en las boletas electorales, cuyo arrastre fue fundamental para todos los candidatos en el año 2018; echados a cuesta con la mala imagen social que les dejará el gobernador en turno y con aspirantes de las otras fuerzas posicionados entre amplios sectores de la población, la carrera por la gubernatura no será nada fácil, veremos…
Y uno de los sectores que será clave en Morelos para la próxima contienda es el magisterio, tal vez por ello la disputa que hoy pretenden muchos de este gremio, pero cuya visión histórica de su comportamiento es ignorada. Así, lo que pretendió ser un espectacular golpe mediático de la triple M está condenado a diluirse más pronto de lo que suponen quienes lo auspician, pues los maestros ya saben que el canto de las sirenas es mero espejismo para sus aspiraciones.
Además, la presencia de muchos cartuchos quemados y la mescolanza de quienes han conformado grupos de poder hacia el interior del sector directivo en el IEBEM y en la Sección 19 del SNTE, algunos ligados al nefasto “graquismo”, han generado un histórico hartazgo entre el gremio magisterial, lo que presupone un rechazo a corto y mediano plazos, no sólo porque los maestros no se han destacado por ser cargada de ningún partido, sino porque su participación en procesos electorales es consciente.
En este contexto, quienes le apuestan a una fractura del gremio magisterial en Morelos yerran nuevamente. La historia nos dice que una y otra vez, estos intentos no han pasado der ser deseos personales y de camarillas sin éxito, no sólo porque el magisterio sabe que detrás sólo hay eso, intereses banales, sino porque la mayoría de los maestros tienen sus referentes claros para organizarse, al tiempo sino…
L@S REDES: Amparados bajo el escudo de los usos y costumbres, varias comunidades del estado son poseídas por grupos delincuenciales que no sólo pretenden actuar bajo su libre albedrío, sino que mantienen sometida a la población sembrando el terror y la zozobra, sin que las autoridades de ningún nivel o grado puedan intervenir. Y ejemplos sobran en Morelos y para muestra, allí nuevamente lo ocurrido en Ocotepec, en la misma capital del estado. Valdría también decir que hay excepciones y en muchos casos, han sido los abusos de algunas corporaciones policiacas lo que ha propiciado una respuesta violenta de la población, sin embargo, ninguna acción justifica una ausencia del estado de derecho o bien el secuestro de la ley y la justicia. En Ocotepec por poco y la sangre llega al río el pasado fin de semana y como que va siendo hora que ya se tomen cartas para prevenir nuevos sainetes, veremos…
*IR