DUDA RAZONABLE. Sin mayor menoscabo, el dirigente estatal de la representación en Morelos del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Sergio Prado Alemán, se dio el lujo de cerrarle la puerta en las narices al nada célebre Manuel Martínez Garrigós. Así que, del mismo modo en que lo dijimos en días pasados: un muerto rechazó a otro muerto. Literalmente el nobel dirigente le dijo al famoso MMG “nos reservamos el derecho de admisión y no: tú no eres el elegido”. Según se dice entre los pasillos de la baja politiquería Graco y Manuel, tienen un acuerdo y de que se van a meter en el proceso electoral no hay duda. Recordemos que comparten liderazgos y simpatizantes que, se mueven según el interés económico. Con todo, dicen que Manuel le ha dicho a los suyos “no me den por muerto” seguro que va por lo que le dejen, entiende claramente que ya no puede seguir viviendo tanto tiempo sin los privilegios del poder.
SIEMPRE FIEL. Sin faltar a las formas en las que siempre han hecho política muchos de los priístas nacionales, el dirigente nacional del Partido (no) Revolucionarios (ni) Institucional (RIP), Alejandro Moreno, “alias Alito”, traicionó quizá a la más grande de sus figuras en la escena pública. En un acto que muestra claramente que Alito va por las migajas, pues no puede pedir más, ayer terminó de sepultar lo poco que quedaba de credibilidad en su instituto político: entregó la candidatura del llamado Frente por México al Partido Acción Nacional y no sólo menospreció, sino que exhibió y humilló a Beatriz Paredes, quien vale decir no estuvo en la conferencia de prensa en la que Alito y su pandilla, manifestaron su total apoyo a la señora X, mejor conocida como Xóchitl Gálvez. Alito como Judas, entregó a lo que tenía por unas cuantas monedas de plata que, al final servirán como su propia mortaja. No es que haya cubierto a su partido con esta acción, seguramente pidió posiciones para él y los suyos a cambio de sacrificar a Beatriz. Nada nos asombra, hoy más que evidente que Alito tiene corazón de priísta, corazón de traidor.
¿HABRÁ FRENTE? En Morelos hay muy poco, salvo uno o dos casos, para elegir un posible prospecto que encabece el posible Frente Opositor entre el PAN, PRI y PRD inicialmente, porque al menos dos partidos satélite se unirían a ellos; sin embargo, el éxito del frente no dependerá de su candidato o de lo que los dirigentes de los tres partidos principales puedan pactar; más bien todo dependerá de lo que suceda en torno a las principales candidaturas en el Partido del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) y sus partidos aliados. Si quienes tienen sus manos a MORENA en este momento se empeñan en colocar a sus “fichitas” ‒no corcholatas-, en las principales posiciones, sobre todo en la que lucha por la sucesión en el gobierno del estado, estamos seguros que incluso estaría en riesgo la coalición en la entidad. Así que, el pronóstico no está muy complicado, sencillamente: si el Cuau, su hermano incómodo y sus secuaces hacen de las suyas, estaríamos hablando de la crónica de una muerte anunciada.
MENTIROSO MENTIROSO. Recuerda aquella película de magnífica interpretación a cargo de Jim Carrey, cuya descripción dice que: “Fletcher Reede (Jim Carrey) es un joven y extrovertido abogado cuyo secreto para ganar todos los casos es mentir. Haciendo gala de una habilidad portentosa ligada a la verdad para defender a su cliente, Fletcher siempre se las apaña para acabar haciendo todo lo contrario sin que nadie se dé cuenta. Este don de la mentira lo ejerce tanto en el campo profesional como en el personal… ayer, el comunicado que emitió el todavía coordinador de Asesores de la Gubernatura, Víctor Mercado Salgado, está de risa. Después de más de ocho meses de actividad, habla del gran despliegue publicitario y propagandístico con su nombre, su imagen y hasta su voz, como si fuese algo que ni siquiera comprende. Y tiene el descaro de “pedir” a sus “simpatizantes” y militantes” ¿cuáles?, que dejen de hacer eso, porque él es respetuoso de las leyes y los tiempos. Dicen que cuando su súper equipo de estrategia política terminó de hacer las líneas de su mentiro-comunicado, todos terminaron con el hocico sangrando y la narizota enorme, tanto que hasta se picaron los ojos entre ellos.