Mal, muy mal. En materia de seguridad, mientras las autoridades del Ejecutivo estatal y sus huestes se curan en salud con el caso del Fiscal Uriel Carmona Gándara, Morelos sigue a la cabeza en diferentes rubros que muestran claramente que la población se encuentra todos los días en constante y grave riesgo. Se podrán decir muchas, pero lo único que no se puede debatir son los números, las cifras, las estadísticas, lo que refleja estado real de las cosas. Por eso, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública en el periodo de enero a abril de 2023, por cada 100 mil habitantes, Morelos ocupa el primer lugar en feminicidio, despojo y robo a banco; segundo lugar en secuestro, homicidio doloso y robo de vehículo; tercer lugar en robo de autopartes; cuarto lugar en robo en transporte público y se ubica en el quinto sitio en robo a transportistas. Tal como lo revelamos hace unos días, la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción de la Seguridad del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), revela que el 80% de la población que vive en Morelos se siente insegura y no es para menos. Incluso el resultado de la encuesta suena un tanto optimista. No hay que olvidar que en el primer bimestre de 2023 repuntaron tres delitos contra las mujeres, entre ellos el feminicidio. Entre enero y febrero de este año los feminicidios crecieron 100% en comparación con el mismo periodo de 2022 debido a que los casos pasaron de tres a seis, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. Peor aún, en los últimos días, al menos se han registrado seis nuevos feminicidios y las cifras en todos los rubros siguen en aumento. Esto es lo que urge la atención de las autoridades, pero su mirada está sobre el proceso electoral que ya viene.
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¿Zapata vive? En la tierra del agrarismo, en el lugar donde nació la lucha revolucionaria del siglo pasado y justo en el marco del 144 aniversario del natalicio del General Emiliano Zapata Salazar, vivimos una etapa singular, con violaciones flagrantes al estado de derecho que constituyen un pisoteo total a la memoria de nuestros antepasados revolucionarios. Si la lucha de Zapata fue por justicia social, porque a los que trabajan el campo con sus manos y a los oprimidos por las clases con poderío económico se les diera lo que corresponde, hoy la lucha está muerta, el legado se perdió. Aunque haya tantos y tantos eventos oficiales para recordar y reconocer al “generalísimo” en la práctica, en la lucha cotidiana de las familias morelenses, a Zapata lo matan todos los días quienes detentan el poder.
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Honor merecido. Sin pagar espectaculares, ni encuestas “patito” hay una mujer en la entidad que avanza no sólo en su encargo, sino también, producto justamente de los resultados de su trabajo y responsabilidad, en la escena nacional. Hablamos precisamente de Juanita Ocampo Domínguez, presidenta municipal de Temixco, quien debido a su labor al frente del ayuntamiento y sus constantes gestiones, el pasado lunes fue designada titular de la Comisión de Información en la primera asamblea de la Conferencia Nacional de Seguridad Pública Municipal, celebrada en las instalaciones de la Comisión Nacional de Seguridad Pública en la Ciudad de México. Lo reiteramos, no gasta en espectaculares, ni en nada que sólo eleve su ego, sino que por el contrario, con un gran equipo de trabajo todos los días se enfoca en su municipio y sin lugar a dudas está logrando resultados sin precedentes. Ahí están las evidencias, en las calles, en las colonias, incluso en el orden administrativo de su ayuntamiento. Hasta ahora no ha levantado la mano, ni ha dicho yo quiero esto o lo otro, aun sabiendo que, en su partido MORENA, todos andan como locos; ella sabe muy bien y ahí lo hace, que su atención absoluta, por ahora, debe estar en su municipio.
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El colmo. Con todo lo que está sucediendo en la entidad, en el Tribunal Superior de Justicia del Estado, se vive un sismo y hay muchas cosas que se dicen sin sustento sobre lo que ahí pasa. Como se ha dado cuenta, a propuesta del magistrado Rafael Brito, ocho de 12 magistrados se manifestaron por incluir en el orden del día de la sesión del pasado lunes por someter a votación la revocación del presidente, Luís Jorge Gamboa Olea, por supuestas faltas graves. Ante esto, los reflectores se dirigieron hacia el exdiputado aliancista, Francisco Santillán, ignorando o creyendo que a todos se nos olvida como llegó Rafael Brito al lugar donde está. Rafael Brito, antes de ser magistrado, fue director jurídico del DIF a cargo de la esposa de Cuauhtémoc Blanco y se menciona que es familiar directo o indirecto, del exdiputado y hoy secretario de Desarrollo Sustentable del gobierno morelense, José Galindo Cortés, quien lo propuso como magistrado en la legislatura anterior. El interés es claro, desde el Ejecutivo lo quieren todo y están haciendo hasta lo imposible, lo ilegal y lo ruin por conseguirlo.
*IR