Todas ellas y todos ellos, tienen algo en común: en esta Navidad, no tienen nada que festejar. En sus casas, hay lugares vacíos, sus familias siguen incompletas.
La tarde de este martes, el colectivo Regresando a Casa salió a las calles en Cuautla, para reclamar la indiferencia y el nulo avance en las investigaciones sobre secuestros y desaparecidos en la entidad.
En la región donde se localizó --entre los límites de la colonia Mixtlalcingo y Huexca, en el municipio de Yecapixtla--, una de las fosas clandestinas más grandes de la entidad, el colectivo hizo acto de presencia para, entre gritos de protesta y con las fotografías de sus desaparecidos en las manos, recorrer las calles.
Posteriormente, a las puertas de la Iglesia de Santiago Apóstol, colocaron, uno por uno, en un árbol de madera, veladoras y mensajes de amor, recuerdos y denuncias en conmemoración de cada uno de los desaparecidos.
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