En el transcurrir de la vida, lo más sencillo, en ocasiones es lo más difícil de obtener porque para no perder la dignidad y ganarse el respeto no es necesario desempeñar cargos de alto nivel o bien manejar cuentas bancarias y viajar en automóviles de lujo o llevar a los hijos a escuelas en el extranjero (Inglaterra) o aparentar ser un filántropo, o llegar a la estulticia (palabra que viene del latín stultos que quiere decir: necio) de querer ser el salvador del mundo; pero, los hechos y las acciones desnudan, encueran, desenmascaran y deja al descobijo y a la intemperie a quien, como se dice, “tira la piedra y esconde la mano”. Las personas de bien vivir y de mejor hacer, esas que en el pueblo se afirma “no sabe ni la “o” por lo redondo, sin tanto rodeo, son personas respetables, que se ganan el cariño y la consideración de cuántos los rodean. En la vida, lo que nos debemos exigir es congruentes entre lo que decimos y lo que hacemos, porque en la 4T, que se pregona desde el Bravo hasta el Suchiate, que no hay corrupción, y en las mañaneras se grita; “No soy tapadera de nadie”, luego entonces, ¿Por qué Francisco Garduño sigue en el puesto como coordinador de la migración? Ese señor que a los ojos de todo el mundo es el responsable de la tragedia de los cuarenta migrantes calcinados, sigue en su lugar y ni suda ni se acongoja, sobre todo cuando su Jefe, López Obrador a todo pulmón dice que es un hombre honesto, trabajador, y con él, el otro, Augusto López, dice, “seguirá laborando hasta en tanto…” la interrogante, entonces ¿qué se necesita hacer para que los lleven a la cárcel? ¡sencillo! ¡sólo ser opositor o crítico del Señor Presidente! Porque entonces sí son declarados como corruptos; sostener a un inepto, irresponsable, omiso y asesino en grado de tentativa, eso se llama corrupción, así haya jugado canicas con el Jefe, al pan, pan y al vino, vino. Tal parece que uno de los objetivos de la 4T es acabar con todo aquello que después del 24 los pueda descobijar. Los Senadores Morenistas se han amafiado para dejar fuera de la jugada al INAI, el Instituto de la transparencia y acceso a la información, y como Blanca Lilia Ibarra, Presidenta del organismo autónomo dice, “no somos un organismo cómodo para el poder. Nosotros trabajamos para la gente”, entonces la orden desde palacio, “simplemente no les nombren los consejeros, háganse tarugos, y el INAI no funciona”, los otros ni tardos, pero sí tarugos, le dan largas y sólo Germán Martínez, protesta, pero como son pocos los protestantes ni quien los pelan. El INAI, porque es autónomo el señor presidente con todo garbo dice, “que se acabe, no sirve para nada”. Señor, el pueblo, no el suyo, sino todos los mexicanos, ¿no tenemos derecho a la información? Porque de ser así es otra mancha al autoritarismo. Como dicen los chavos de la Prepa, ¡Ah como se aprende de esta gente bonita! Cuando algo les sale mal a los malandros, dicen muy orondos, “¡Ya se la pellizcaron!, o lo que es lo mismo, ¡se chingaron! Así los morenos, los senadores, que tenían la sana intención de darle ¡en la madre! nada más ni nada menos que al Tribunal Federal Electoral, y quienes hicieron la tarea fueron las mujeres legisladoras, que demostraron tener más ovarios y dijeron no va. El Trife, es el espacio que no ha permitido la formación de cotos de poder: los cotos son espacios cerrados donde los que ahí se encuentran hacen lo que se les da su retiznada gana, los senadores gandayas (abusivos) tuvieron la virtud de unir a todas las mujeres de todos los partidos y colores, para no permitir una acción más, regresiva, que en lugar de dar avance a la democracia se pretendía reimponer la vida patriarcal y que las mujeres perdieran sus derechos que se han ganado de forma legítima. Les hicieron ¡aut! en jom y a la goma. Es de suponer cómo les fue en el palacio de Versalles, porque de ¡inútiles! Si bien les fue, no los bajaron. Por el fruto conocerás el árbol, dice el refrán, y si de pasarse a las normas, las leyes, estatutos y todo lo que huela a legal, los del Movimiento se mueven bien y bonito, veamos, Mario Delgado y su equipo pesado, Xochitl, ya se amarraron para seguir succionando de la ubre del poder hasta más allá del veinticuatro, porque son los únicos “en la bola” con la capacidad de asegurar el triunfo de los candidatos a las gubernaturas y el de la corcholata, la que sea, para la presidencial. Bien por el Tribunal del Estado de México que le dijo: “Señora Delfina, aquí se hace el amor el día 20 con usté o sin usté”, -Respuesta, “No señor, señor, si ya voy pallá”. ¿No qué no? Marchando y meneando, con buen pasito. Porque la señora dijo, “Aquí, sólo mando yo”. Despacito, “mayestra” despacio se llega lejos y quien temprano se levanta encuentra todo cerrado. Esperemos y veremos. Ya de salida, si alguien sabe de Alejandro Solalinde, El cura político, díganle que Pancho sigue en la silla y de como van las cosas o se la hacen de jamón o se va a tocar un violín. HASTA LA PRÓXIMA.
*IR