La universidad Complutense de Madrid define a la violencia vicaria, como “la expresión más cruel de la violencia de género”. Según la institución académica “la violencia vicaria es la más cruel y despiadada porque causa un daño irreparable y destruye a la mujer” y da como marco de referencia que “más de 40 niñas y niños han sido asesinadas/ os por sus padres biológicos o parejas o exparejas de la madre, cuyo objetivo es destruir a la mujer para siempre”.
Apenas en el 2013 se empezó a contabilizar este tipo de asesinatos y a visibilizar esta condición de violencia contra la mujer que abarca un espectro muy amplio de agresión: agresión sexual fuera y dentro de las relaciones de pareja, golpes, destrucción moral, humillaciones y torturas: agresiones a los hijos y hasta las mascotas. Todo aquello querido, protegido o deseado por la mujer, es destruido.
En Morelos, a estos casos, se les comienza a poner nombre y a convertirlo en denuncia. Algunos colectivos, dan cuenta del registro de 19 expedientes en los que la violencia vicaria está claramente definida y donde el juzgador se ha mostrado insensible a la condición que enfrentan la víctima, tratando erróneamente de mostrarse vanguardista en casos de separación matrimonial y la custodia de los menores.
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CONSECUENCIAS DE LA VIOLENCIA VICARIA
Las exparejas de las mujeres que son víctimas de este tipo de violencia agreden a los seres queridos de éstas para causarles dolor. Pero ese no es, en todos los casos, el único fin. Pues los violentadores pueden usar el sufrimiento de la madre para chantajearla y hacer valer su supuesta autoridad.
Los miembros de la familia que están dentro de esta situación de violencia pueden sufrir estrés, ansiedad, estrés postraumático, entre otro tipo de problemas psicológicos. Esto sin contar los daños físicos de los hijos que pueden ser víctimas de la violencia vicaria.
LOS NIÑOS COMO VÍCTIMAS CENTRALES
La infancia es particularmente afectada por la violencia vicaria, al ser el blanco de agresiones de las exparejas de las mujeres. Los hijos no solamente pueden ser maltratados físicamente. Incluso, cuando el agresor no se puede acercar a ellos, puede enviarles amenazas, hostigarlos y acosarlos por diversos medios.
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¿POR QUÉ TIPIFICARLO COMO UN DELITO ESPECÍFICO?
La violencia vicaria puede ser solo el inicio de una serie de actos de agresión en contra de los hijos y la mujer. En algunos casos de feminicidios existen antecedentes de violencia intrafamiliar que siguió aún después de la separación de la pareja.
Además, algunas mujeres no pueden denunciar al agresor debido a que no son ‘directamente’ afectadas. De este modo, tipificar el delito de la violencia vicaria permite proteger a los hijos y a la madre, tanto a nivel de prevención, como de erradicación y sanción.
*IR