Tras la detención de “El Seven”, líder de la Familia Michoacana en Morelos y uno de los objetivos criminales prioritarios del gobierno de Morelos, no se descarta que la inseguridad aumente en Cuernavaca, luego de que fue capturado la tarde-noche del lunes en la colonia Rancho Tetela.
El presidente municipal de la capital, José Luis Uriostegui, refirió que el recrudecimiento de la delincuencia es “normalmente una consecuencia", cuando se captura a un miembro de la delincuencia organizada, al tiempo de reconocer que aún falta un operador por detener, de tres que se tenían bajo investigación.
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“Cuando hay detención de los líderes, los lugartenientes siempre buscan hacerse del cargo y entran en confrontaciones entre ellos. Es factible que eso suceda y la secretaria Alicia Vázquez Luna ha tomado nota de lo que pudiera venir como repercusión”, añadió.
El funcionario recordó que hace más de un año, el Gobierno estatal le notificó la presencia de autoridades federales que investigaban el paradero de “El Seven”, por lo que el Ayuntamiento sólo se enfocó en realizar tareas de prevención para disminuir los índices delictivos, pues no es su facultad realizar tareas de investigación.
“La información que se nos dio es que había tres grupos de la delincuencia organizada operando en el municipio. Dos líderes han sido capturados, con el de ayer, y sólo falta uno. Lo que hacemos es mantener una presencia constante. No podemos hablar de un reforzamiento porque no hay más elementos disponibles y los utilizamos al máximo de la capacidad”, explicó.
Uriostegui Salgado comentó que la detención de “El Seven” fue competencia de la Fiscalía General del Estado y el Ayuntamiento a su cargo, a través de la Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano (Seprac), logró el aseguramiento de dos personas masculinas que fueron puestas a disposición de la FGR porque en flagrancia se les encontraron cartuchos y proyectiles útiles.