El encargo al congreso

Dominó social

 Hoy inicia el nuevo año legislativo en el Congreso del Estado, y en definitiva, este periodo, los ciudadanos tenemos muchísimo más esperanzas puestas que en lo que fue el propio arranque de gestión de la actual legislatura; y es que sobre la mesa en definitiva hay temas casi imperdonables de ignorar.

Ya nuestros diputados tuvieron su año de protagonismos; ahora es momento de olvidarse de revanchas políticas y verdaderamente trabajar en favor de quienes los pusimos en ese lugar, los ciudadanos morelenses.

Por inicio de cuentas les encargamos a los diputados con carácter de urgente, que por favor se nos pongan de acuerdo en el presupuesto 2023, porqué en lo que va de este año, ¡ah como la hemos sufrido!, sí que se sintió los estragos de sus pleitos partidistas que no permitieron la aprobación del presupuesto 2022. Es urgente que los diputados entiendan que están ahí para trabajar por los morelense con o sin partidos, sin distinción de filias o fobias. Urge un mayor presupuesto para el sector salud, para la educación y el campo morelense.

Urge en extremo abordar desde sus facultades la situación de inseguridad en la que cada día nos estamos hundiendo más como estado, y es que a todos nos está afectando, y si desde el legislativo no se empieza a trabajar de manera coordinada con los distintos niveles de gobierno, dentro de muy poco la situación empeorará y ahí si nos veremos en enormes aprietos.

Entre los pendientes que deben trabajar a la brevedad nuestros parlamentarios, en definitiva, está el sistema salubre del Estado, y es que si ya comenzaron a abordar un poco el tema a finales del periodo anterior, pues que no lo dejen pendiente y comiencen a presionar a las autoridades estatales para que por fin se dé un servicio digno a quienes somos usuarios.

Y muy de la mano en materia de salud, está sobre la mesa desde hace ya varias legislaturas que nuestros representantes aborden de manera definitiva la despenalización y legalización de la interrupción del embarazo, pues las cifras de clandestinidad en nuestro estado comienzan a ser alarmantes, de acuerdo con datos del propio INEGI en 2020 en nuestro estado se reportaron 399 muertes fetales, de las cuales se estima un 20% fue por prácticas ilegales de interrupción del embarazo, siendo un 54% de dicha cifra adolescentes menores de 19 años; por tal motivo es imperativo que nuestros legisladores tomen cartas en el asunto, y aborden el tema, pero desde un papel legislativo ético, si creencias personales, ni posturas religiosas, pensando única y exclusivamente en el derecho máximo a la salud y una vida digna.

Ojalá que nuestros diputados, con este nuevo comienzo de sus labores legislativas también comiencen a recorrer las calles de nuestro estado, rincón por rincón, así como lo hicieron en campaña, y que lo hagan para darle seguimiento a la realidad de la que se percataron hace un año, pero eso sí, que lo hagan sin afanes partidistas, sin intención de jalar agua a su molino, que salgan a cumplir las cientos de promesas que hasta hoy están inconclusas.

Finalmente, si bien la conformación de un parlamento es asunto político, es imprescindible que en tribuna se olviden de los intereses partidistas que representan, y que como personas civilizadas que son comiencen a ponerse de acuerdo en beneficio de nosotros que los hemos puesto ahí.

 

*IR