Ideales y valores políticos, en el sótano

Generando

Los actuales acontecimientos electorales partidistas, en este caso, de MORENA, muestra la verdadera realidad de la formación de la persona, de quienes están buscando participar como Delegado o Consejero para las Asambleas Estatales y Nacional de dicho partido.

Este proceso sirve de referencia para esta aportación, sin embargo, no es propio de este partido. Las organizaciones políticas están conformadas y dirigidas por personas, y la naturaleza de las emociones, los valores, las decisiones, la ética, es similar en la gran mayoría de la gente. Por lo tanto, las percepciones, comentarios, señalamientos, calificativos que se realicen a continuación, es aplicable a todos los participantes de la política en la actualidad.

Los interesados en ser elegidos como delegados, consejeros, congresistas, dirigentes municipales y estatales, de un partido, lo hacen bajo un común denominador, claro está; por el de participación en el poder, y eso es un derecho que tenemos todos los ciudadanos, por lo que esa parte no se discute. Es muy aceptable y loable que haya mucha gente interesada a participar en las decisiones políticas del país. Lo que sí es reprochable y mucho, es la ambición, el interés material, económico, por la oportunidad que esa participación les permite, de ser integrante de un equipo de alguien que obtendrá un cargo de elección popular o funcionario, o trabajador en el gobierno, en cualquier orden y a cualquier nivel. Esa ambición malsana que deja a un lado los valores de servicio principalmente, de respeto a los demás, de ética en el pensamiento, en las acciones y las decisiones, lo que convierte a casi todos los participantes en buscadores de empleos.

Y lo estamos viendo en el actual procedimiento del partido en el poder, en el que existe una gran cantidad de políticos buscando ser electo o aceptado como delegado para decidir por algún candidato de su interés, porque sabe que tendrá la oportunidad de ser tomado en cuenta para un empleo. Lo vemos en los políticos de mayor nivel como gobernadores y sus familiares en todos los estados que tendrán elección interna porque buscan mantenerse en el poder. Y ya se generan conflictos violando sus propios estatutos y reglamentos, dejando a un lado los valores de las personas y a sus organizaciones. Y así será en casi todos los organismos que tienen muchas posibilidades de obtener cargos de elección popular, que son los partidos grandes. Así ha sido con el PRI, con el PAN, con el PRD y todos aquellos que en su momento se convierten en partidos en el poder.

Lo anterior es lo que ha provocado que los cargos se utilicen para enriquecerse, aquellos que ocupan los espacios en donde se manejan los recursos. Esa es una de las razones principales para que en nuestro país no pueda erradicarse la corrupción. La violación a la Ley es un hecho cotidiano por quienes ocupan cargos públicos y eso es transferible a la ciudadanía común, convirtiendo la política en un lodazal. La que se decía que era la única forma para que hubiera paz entre gobernados y gobernantes, se ha convertido en el medio pueril de vivir del presupuesto público, tanto en los niveles inferiores como en los superiores de los gobiernos.

Eso es lo que ha provocado que el sentido de servicio de los gobernantes y trabajadores se esté perdiendo y convierta a los gobiernos en una agencia de servicios, favores, de empleadores.

Existe en nuestra Constitución, en la Ley de Servicio Profesional de Carrera en la Administración Pública, existe la Ley de Profesiones y más legislaciones actuales que contemplan valores para la participación en la administración pública. Urge que se revisen esas leyes, que se realicen las modificaciones, la creación de nuevas leyes, para regular ese desenfreno ambicioso de las personas por los cargos públicos, como un botín para sus grupos.

Pero urge más trabajar en la educación, para que las nuevas generaciones sean formadas en la bese de los valores. La corrupción, la ambición malsana, tiene su origen en la falta de educación. Es más, todos los problemas que vive un país tiene el origen principal en la educación mala que se ha ejercido durante los últimos años.

Se requiere voluntad personal para cambiar nuestro mundo.

*IR