Desde el pasado fin de semana los elevadores del hospital José G. Parres en Cuernavaca se descompusieron y fueron clausurados por la COFEPRIS por lo que los pacientes que entran a cirugía son trasladados por las escaleras y otros han tenido que permanecer en los quirófanos hasta más de cuatro días, así lo reveló Gil Magadán Salazar, secretario general del Sindicato 29 de los Trabajadores de la Secretaría de Salud de Morelos.
En entrevista, el líder sindical dijo que está muy preocupado por la situación en la que se encuentra el Hospital General José G. Parres porque además del daño estructural que tiene, está abandonado y no cuentan con insumos y los elevadores se descompusieron desde el pasado fin de semana y las autoridades se comprometieron a repararlos a más tardar el viernes.
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Sin embargo, detalló que esto ha implicado que tengan que trasladar a los pacientes por las escaleras y uno de plano que no se pudo cargar se quedó en el quirófano cuatro días para evitar que se cayera o el personal se lesionara y se incapacitara.
Lamentó que las autoridades de los Servicios de Salud perdieron la brújula y tienen otras inquietudes políticas, económicas, personales y de grupo y no les importa la atención de la salud de los morelenses.
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“Nos falta mucho recurso, personal, insumos material y equipo y la autoridad está más preocupada en resolver otros problemas”.
Ante esto, demandó al gobernador Cuauhtémoc Blanco que voltee sus ojos al hospital José G. Parres porque están en una situación muy crítica para atender a los pacientes y están rebasados.