De sangre cañera y un icono en el balompié nacional, sobre todo admirado por la afición morelense, el ex arquero Pablo Larios Iwasaki fue ingresado al salón de la fama como parte del reconocimiento a su carrera deportiva y sobre todo al legado que dejó bajo la portería en la selección nacional.
Pablo Larios nació en Zacatepec el 31 de julio de 1960 y fue precisamente con el equipo de su casa, con los Cañeros del Zacatepec donde inició su carrera. Hasta la fecha, fue el único jugador que estuvo en la selección nacional pese a militar en un equipo de la Segunda División.
En una ceremonia de investidura realizada en el Salón de la Fama del Futbol Internacional que tuvo lugar en Pachuca, tuvo nuevos invitados en donde destacó el ingreso del portero morelense Pablo Larios Iwasaki, además de otras estrellas de talla mundial como Ronaldinho Gaúcho, el defensa italiano Fabio Cannavaro, el español Raúl González y el brasileño Roberto Carlos.
Cabe destacar que Larios se ganó un lugar en el salón al ser uno de los porteros más destacados en la década de los 80´s, en su carrera deportiva llegó a portar la playera del Zacatepec, Puebla, Cruz azul, Toros Neza y por supuesto la del combinado azteca.
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Tras poner fin a su carrera profesional con Neza en 1998, Larios tuvo un paso como entrenador de porteros y como auxiliar técnico, sin embargo, seguir en las canchas no era su destino ya que se retiró del campo y únicamente se le veía en homenajes.
Bajo los tres postes vivió una de las máximas leyendas del fútbol nacional y sobre todo, de su tierra; fue la selva cañera que vio nacer y crecer a una de las figuras más icónicas del balompié y hoy marca historia en el fútbol morelense.