Marcar diferencia
A poco más de un mes para que termine este 2021 y las administraciones municipales electas tomen posesión del cargo, las cosas se ven agitadas por diversos acontecimientos que pueden mover las decisiones en estos siguientes 30 días. La detención de una líder del crimen organizado y sus relaciones de complicidad con diversos actores políticos y su posible intervención de manera indirecta en un partido político, son elementos que ya se habían venido comentando desde hace algunos años y aunque se pretende no hacer mucha alharaca, la realidad es que la red de complicidad, entre quienes ostentan dinero a manos llenas con quienes lo ocupan para financiar campañas políticas, es cada día más evidente sin que existan consecuencias legales por esas acciones ilegales e ilegitimas.
El dinero que se gasta en las campañas políticas lo recuperan cuando el político beneficiado entra en funciones a través de diversos mecanismos. El tema es que al final los más perjudicados somos los ciudadanos porque el poco dinero que se asigna a los ayuntamientos se va por el caño de la corrupción en detrimento de la calidad de los servicios y la paupérrima inversión en obras de beneficio comunitario.
Todo esto viene a colación por la coyuntura legislativa de aprobación del presupuesto de egresos y las leyes de ingresos municipales que se deberán aprobar en estos días. Es evidente que el presupuesto asignado al Estado de Morelos no es suficiente para las necesidades del mismo y lo que asigna a los municipios tampoco lo es. Si a esto le sumamos los compromisos adquiridos en campaña entonces tenemos una ecuación lamentable porque los números no cuadran, pero así operan los ayuntamientos y la bola de nieve cada vez es más grande.
En algunos municipios estos compromisos inciden en la imposición de los tesoreros o de directores de obra de las personas con las que se comprometió el presidente electo y entonces en pago al compromiso es acceder a dejar uno o los dos cargos de mayor relevancia financiera en los ayuntamientos con las consecuencias que esto conlleva. El tema es que todos los ayuntamientos operan bajo este esquema.
Hay un número importante de ayuntamientos que ganó la coalición que hoy gobierna la federación y si nos atenemos a los lineamientos generales que implementa la 4T a nivel federal se debería ver y sentir en el ámbito municipal una diferencia sustancial en los gobiernos emanados de la coalición “Juntos Haremos Historia”. Porque las características del gobierno federal así lo enmarcan, sin embargo, la realidad es que no hay diferencia, parecen y son lo mismo los gobiernos emanados de uno u otro partido político. La clase política en Morelos es la misma y no hay un ápice de diferencia respecto a otros gobiernos emanados del PAN o del PRI, parecen exactamente lo mismo y eso debería ser una preocupación de Morena en el corto y mediano plazo.
El grupo que mantiene el control de Morena en el estado debería de implementar una estrategia de capacitación política, ideológica y administrativa que permitiera marcar diferencia respecto de otras administraciones. No mentir, no robar y no traicionar no parecen ser un lema que manejen quienes están al frente de algún encargo administrativo, legislativo e incluso político. Ejemplo de ello hay muchos comenzando por el alcalde saliente del gobierno de Cuernavaca, el lobito se caracteriza más por su ambición desenfrenada que por ser un luchador social al frente de un tarea administrativa o el ex legislador Marcos Zapotitla que también fue integrante del Comité Estatal de Morena saltó de un partido a otro y terminó con una denuncia por violación. Esto por mencionar dos ejemplos, pero es la generalidad por ello me parece fundamental, que más allá de atender cuestiones internas de partido, también es importante atender una estrategia definida para ir marcando diferencia y tanto presidentes y sus respectivos cabildos, como legisladores se les capacite y fomente el hábito de prepararse en el ánimo de ser representantes dignos de lo que necesita la sociedad y que sean reconocidos por sus acciones en favor de quienes votaron por ellos. Se puede cuando se quiere, ojalá se escuche y se quiera avanzar en una propuesta con sentido social y marcar diferencia.
*IR
