De Ex Presidente a Presidenta// ¿Qué conjeturó Zedillo que tanto molestó en Palacio Nacional?

Ingeniería de sueños

¿Qué conjeturó Ernesto Zedillo, ex Presidente de México, -que gobernó del 1 de diciembre de 1994 al 30 de noviembre del 2000-, para que molestara tanto en Palacio Nacional?  ¿Qué es una autocracia de partido único? 
En un capítulo más en la historia de la Reforma Constitucional, esto sucedió: El detonante fue un artículo publicado en un prestigiado periódico extranjero: The Washington Post, el 1 de noviembre de 2024. 
El encabezado era muy claro e iba a la yugular: “El presidente de México alimenta una crisis constitucional”, y en una primera bajada, afirmaba categórico: “Al apoyar las reformas radicales de su predecesor, Claudia Sheinbaum está destruyendo la democracia de México”. 
¡Zaz! Un mensaje duro y seco. Si el ex Presidente Zedillo, quería generar escándalo y llamar la atención, lo logró, sacó ámpulas y al parecer, pisó callos; ya que la actual y primera Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, en la hoy llamada “Mañanera del Pueblo”, enseguida reviró mediante una interpelación, protesta y queja, donde el tono tuvo tendencia y propensión a exigencia de disculpa y reivindicación y, de paso, ella dio un “recargón” y dejó ver la falta de probidad y carácter moral de parte del ex mandatario durante su gobierno.
Dijo la Presidenta desde la tribuna pública y primer micrófono de la Nación en la “Mañanera”: “…él cambia la Constitución, quita todos los ministros y ministras. Ministros, creo que eran entonces puros hombres, y eligen a 11, él en alianza con el PAN y con el PRI. Y ahora, nos dice que eran independientes, super independientes, cuando ni siquiera se atrevieron a decir algo sobre el Fobaproa, la mayor estafa a los mexicanos y mexicanas”. 
Doble ¡Zaz! Se puso interesante el intercambio de contenidos en las agendas políticas y las acciones de gobierno desde un primer nivel, la cúpula que ambos -Zedillo y Sheinbaum-, conocen más a fondo y no limitado a lo que es solamente público. Así que: ¡Pueblo Bueno: tomen su asiento y saquen las palomitas!
Para estar en contexto, había que leer atentamente el Artículo de Ernesto Zedillo y luego estar prestos al revire por las alusiones personales a Sheinbaum, ya que el contenido sí había causado evidentes molestias; pero ¿qué conjeturó Zedillo que tanto molestó en Palacio Nacional? 
Entre otras cosas, en los primeros párrafos de lo publicado en The Washington Post, Zedillo abrió el juego con una provocación, al afirmar: “… Claudia Sheinbaum ganó las elecciones de junio para dirigir un país democrático, algo que México ha sido verdaderamente durante casi 30 años. Sin embargo, como presidenta, parece comprometida con seguir el objetivo de su predecesor de convertir a México en una autocracia de partido único…”
Al someter a un análisis de contenido ese dicho, se nota clara la intención de abarcar el espacio y escenario político de forma horizontal, paralelo, transversal, circular, cuadrado y toroidal… salpicó, y a unos más que a otros, caló.
“Ahora, fíjense” -inició la contra réplica de la Presidenta en notoria actitud de disgusto a la mañana siguiente frente a los trabajadores de la comunicación, ante los representantes de la Prensa nacional a quienes les dio detalles- “…y lo mencionó un expresidente de México, hoy vocero —bueno, siempre fue vocero del conservadurismo, pero hoy más todavía—. Fíjense dónde publica su artículo, para empezar. ¿Lo publicó en un periódico de circulación nacional? No. ¿Lo publicó en sus redes sociales exclusivamente?  Lo publica en un periódico de Estados Unidos, el Washington Post. ¿No les parece que algo no está bien?” 
-Y siguió luego de una brevísima pausa: 
“…O sea, ¿a quién le está hablando?, ¿al pueblo de México desde un periódico en Estados Unidos? Pues lo hubiera publicado en Reforma, en El Universal, en Milenio, en Excélsior, en… –¿quién me falta?–, en Proceso, El Heraldo, cualquiera.”
Fue buena defensa, pero, enfocando más al Pueblo Bueno en el punto nodal: ¿qué es una autocracia de partido único? ¿por qué dijo eso Zedillo? La autocracia de partido único ha sido señalada, apegándonos a la historia, en países como Unión Soviética (1922-1991): Dominada por el Partido Comunista, se caracterizó por la represión política y la economía de planificación central. En Cuba: Desde la revolución de 1959, el Partido Comunista ha mantenido un control total sobre la política y la sociedad cubanas. En China: Desde la victoria del Partido Comunista Chino en 1949, este ha mantenido un monopolio sobre el poder político, aunque ha introducido reformas económicas que han permitido ciertos grados de liberalización. En Corea del Norte: El Partido de los Trabajadores de Corea ejerce un control absoluto sobre el país, con una fuerte represión de cualquier forma de disidencia.
Desde esa perspectiva, se afirma que el origen de las autocracias de partido único, se pueden rastrear en diversas circunstancias históricas y sociales, como: ideologías totalitarias donde ideologías como el comunismo, el fascismo o el nacionalismo extremo han facilitado el surgimiento de partidos únicos que promueven una visión homogénea del Estado y la sociedad.
La conjetura, adivinanza, vaticinio, pronóstico, profecía, augurio, -o como se le quiera llamar- de Ernesto Zedillo en su Artículo, al decir que: “…como presidenta, parece comprometida con seguir el objetivo de su predecesor de convertir a México en una autocracia de partido único”, es que en la autocracia de partido único, se restringen las libertades individuales y controlan aspectos clave de la vida económica, social y política, crean un entorno donde los ciudadanos tienen escasa o nula capacidad para influir en su propio destino y esto no solo afecta su calidad de vida, sino que también impide la construcción de sociedades democráticas, justas y equitativas.
Volviendo a la “Mañanera del Pueblo” y a las respuestas de la Presidenta Sheinbaum, ella pidió al equipo de apoyo en Comunicación, le proyectaran una carta de López Mateos cuando el ex presidente nacionalizó la industria eléctrica. La leyó y volvió al Artículo de Zedillo y al lugar de publicación: “No, no lo publica en un periódico nacional, lo publica en el Washington Post. Entonces, ¿a quién se dirige? Pues a los estadounidenses, ¿no? O al gobierno de Estados Unidos o a la política de Estados Unidos- y remató la Presidenta- Bueno, él privatizó los ferrocarriles a extranjeros”.
El tema entonces, en la “Mañanera del Pueblo” cambió, la Prensa se enfocó ahora a un asunto del INE, y así fue un capítulo más en la historia de la Reforma Constitucional, ahora muy frontal, hubo rating alto y tuvo actores principales y el nudo de la trama fue de ex Presidente a Presidenta.

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