El uso de armas, especialmente las de fuego, para la comisión de delitos se ha incrementado en Morelos, a grado tal que ya ocupa el tercer lugar nacional en la incidencia, con el 37.8 por ciento de los casos, que supera la media nacional, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI).
En la comisión de delitos en los que la o las víctimas están presentes, se han utilizado lo mismo armas de fuego que blancas, así como objetos contundentes, como son palos, varillas, tubos y otros implementos similares, lo que ha derivado también en el incremento en el uso de la violencia por parte de los delincuentes para consumar sus fechorías.
Nuestra entidad solo es superada por Guanajuato, que ocupa el segundo lugar nacional, con 41.7 por ciento de incidencia, lo mismo que por la ciudad de México, con el 47.2 por ciento del registro de casos. Morelos figura en el tercer lugar con 37.8 por ciento, por encima de la media nacional, que es de 34.2 por ciento.
Es preocupante que el uso particularmente de armas de fuego esté aumentando en la comisión de ilícitos, lo mismo para la comisión de feminicidios como para las disputas por las plazas en cuestiones de narcomenudeo, como han advertido tanto representantes de organizaciones no gubernamentales, como las propias autoridades.
Es Susana Díaz Pineda, integrante del Centro de Derechos Humanos Digna Ochoa, quien ha señalado que, en los feminicidios, los agresores están recurriendo a nuevos mecanismos para acechar y asesinar a sus víctimas, como son la utilización de motocicletas, lo mismo que dispararles arteramente con el vehículo en movimiento.
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La incidencia de uso de armas de fuego en la comisión de feminicidios va en aumento, refiere Díaz Pineda, quien afirmó que los atacantes prefieren ejecutar a las mujeres a bordo de motocicletas porque es una manera contundente de actuar que, además, les garantiza una rápida escapatoria para eludir la persecución de las autoridades.
En lo que va de 2024, ya van 96 feminicidios registrados en la entidad, de acuerdo con declaraciones vertidas por la vocera de la colectiva “Divulvadoras”, Andrea Acevedo, quien ha insistido en la necesidad de la implementación de políticas públicas para la erradicación de la violencia que tanto afecta a este sector de la sociedad.
Del mismo modo en que las representantes de organizaciones sociales han llamado la atención en torno al aumento de la violencia, así como la utilización de armas de fuego en la comisión de homicidios dolosos, así también la presidenta del Tribunal Unitario de Justicia Penal para Adolescentes, Adriana Pineda Fernández, ha hecho pública la preocupación de que los jóvenes involucrados con el narcomenudeo se están armando no solo para la distribución de drogas, sino para protagonizar enfrentamientos contra bandas rivales, en las disputas por el territorio.
Hasta ahora, sin embargo, salvo las campañas para la entrega de armas, a cargo de autoridades del Ejército y estatales, no hay una estrategia para impedir que en Morelos circulen las armas sin contratiempos y que, incluso, lleguen a manos de los jóvenes.