La crisis en el trasporte es tan sólo uno de los enormes problemas que la nefasta administración del gobernador Blanco Bravo le va a heredar al nuevo gobierno que encabezará Margarita González Saravia. En realidad, el desastre en que se encuentra el estado y la ingobernabilidad que es el sello de la casa, pueden retardar el inicio de una gestión que hasta ahora es muy optimista y trata de generar condiciones favorables para un buen arranque.
Y es que incluso, aunque el sainete que protagonizan los concesionarios transportistas a través de las agrupaciones que los lideran y el gobierno a cargo del exfutbolista, logre resolverse en una mesa de negociación, este sólo sería un paliativo al problema de fondo y que es mucho más grave, es decir, el de que los morelenses no la ven llegar con un servicio de peaje digno y seguro, por el contrario, si algo ha empeorado con los años al grado de convertirse en un tema de seguridad estatal, es la ínfima calidad y el alto riesgo que caracteriza al servicio público de trasporte del estado, con y sin itinerario fijo.
Además, la corrupción que rodea a este sector del desarrollo urbano y económico del estado es tal, que representa una bomba de tiempo permanente, al quedar en el olvido los propósitos sociales que le dieron origen allá en el gobierno del Dr. Lauro Ortega Martínez (1982-1988), quien entregó concesiones a particulares, choferes del que en ataúdes rodantes prestaba un servicios caro y malo, así como a choferes de taxis, entre otros, para crear las 20 rutas de transporte colectivo que hoy existen.
No es un secreto que las concesiones que son propiedad del gobierno hoy son usufructo de grupos de monopolios que al paso de casi cuatro décadas desplazaron a sus originarios propietarios, e irónicamente este sector se transformó en el monstruo de las mil cabezas que en aquel entonces se quiso enterrar y que se denominaba “pulpo camionero”, una especia de mafia que tenía secuestrado un servicios infame y caro, como el peor dolor de cabeza de los usuarios.
Lamentablemente hoy la historia parece repetirse, ya que mientras el sector de los concesionarios del transporte colectivo quiere imponer su ley, enfrente se encuentra un gobierno que parece estar comprometido hasta las cachas y que más que soluciones, lo que pretende es dejar una papa caliente a la próxima administración.
Para colmo, no es sólo el tema del transporte donde los conflictos no tuvieron la atención y las soluciones que se han requerido, ya que el campo, por ejemplo, es otro de los ámbitos que el gobernador Blanco Bravo no quiso atender, así como el de la inseguridad que como sabemos, irremediablemente le va a heredar al próximo gobierno encabezado por González Saravia.
Así pues, Morelos y los morelenses pagan caro haber recibido a Cuauhtémoc Blanco en estas tierras y se deberá afrontar el atraso de seis años en el desarrollo y los enormes problemas existentes, cuya crisis alcanza desde luego los ámbitos de salud y la educación, así como la ausencia de obra pública, cuya justificación ha merecido del excelso exfutbolista una frase que quedará para la posteridad. “no hicimos obras tan grandes, pero no nos clavamos la lana como el gobernador anterior (Graco Ramírez)”, a ver…
L@S REDES: Nuevamente el Poder Judicial Federal Electoral exhibe de fea forma al Tribunal Estatal (TEE) revocando el fallo que redistribuyó las diputaciones plurinominales que el IMPEPAC había asignado y que extrañamente benefició al dirigente estatal de PRI Jonathan Marques. Este asunto se suma a varios más en que de igual forma, las magistradas del TEE quedan en ridículo y alientan las suspicacias que de siempre ese órgano colegiado ha despertado y que reabre una vez más el debate acerca de su razón de ser, pues con estas pifias no se justifica su existencia y, sobre todo, el presupuesto que se gasta en él, principalmente el pago de los altísimos emolumentos a las y los magistrados que lo han integrado en su historia, veremos… A partir de ayer el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) abrió una consulta para sus agremiados en todo el país, con el propósito de integrar una propuesta para crear el nuevo organismo de evaluación docente que sustituya a la Unidad del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros (USICCAM). Como se ha comprometido por la presidenta electa Claudia Sheinbaum, este mecanismo encargado de los procesos de ingreso, promoción y reconocimiento en el servicio docente será eliminado y en su lugar se creará una nueva instancia, de allí que en la consulta cuyas bases están en la convocatoria respectiva, permitirá conocer la opinión y las propuestas de quienes son precisamente los sujetos a esa evaluación, veremos…