Mientras a la víctima se le cancela la audiencia, a menos de una hora de celebrarse, al acusado, Marcos “N”, se le concede otra para que se defina si las autoridades judiciales cambian la medida cautelar de prisión preventiva a prisión domiciliaria.
De nueva cuenta, se pospuso la audiencia en el caso del exdiputado Marcos "N". Del Tribunal Superior de Justicia llamaron a la víctima, con menos de una hora de anticipación, para notificarle que, debido a una reunión del pleno, su audiencia fue pospuesta. Y, sin embargo, al acusado se le concedió una audiencia para definir si sigue su proceso en prisión domiciliaria, a lo que la víctima señaló: “¡Es una burla! ¡Qué casualidad!”
A poco menos de una hora de que se celebrara la audiencia en la que la parte acusadora sumaría un nuevo cargo contra el exlegislador, ahora por discriminación, recibió la llamada la mañana de este lluvioso lunes para notificarle que se suspendía la audiencia programada para las 11 del día de este primero de julio.
La víctima afirmó a Lodehoy Morelos que del mismo modo en que no le dieron mayores explicaciones de la cancelación de la audiencia, salvo la reunión del pleno, tampoco le fijaron fecha para la realización de una nueva audiencia.
No obstante, trascendió que, a cambio, se programó una audiencia para el exlegislador, con objeto de analizar la solicitud de su defensa en torno a cambiar la medida cautelar contra él definida, que es de prisión preventiva, para que se convierta en prisión domiciliaria.
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La víctima afirmó en mensaje grabado: “Ante la cancelación de la audiencia de hoy en el Tribunal Superior de Justicia, acerca del caso del exdiputado, de antemano me parece muy raro que cancelen en menos de una hora. Desconozco el motivo. Solo me hicieron saber que van a estar en pleno los magistrados y que va a ser imposible atender mi audiencia”.
Y agregó: “No me dieron nueva fecha. Sigo a la espera de buscar justicia”.
Esa justicia que, en tratándose de ella, el caso del exdiputado Marcos "N" se ha prolongado ya por años, debido a las tácticas dilatorias del acusado, que al menos en más de 10 ocasiones ha cambiado de abogado defensor, hasta que un juez determinó que, si no fijaba ya un defensor formal, se le asignaría uno de oficio.
Otra de las tácticas empleadas por el exdiputado es la exigencia de que se contara con la presencia de un traductor de una comunidad indígena, en específico de Tetelcingo, en Cuautla, pues es su comunidad original. Estando en su derecho de solicitarlo, los juzgadores no le negaron la petición. No obstante, fue precisamente ante los juzgadores que Marcos “N”, a pregunta expresa, reconoció que habla perfectamente el español.
Otro de los aspectos que llama poderosamente la atención de la víctima es el hecho de que, para la celebración de las audiencias, se le notifique con menos de 24 horas de anticipación, o que ocurra como esta vez, en que fue con menos de una hora que le dieron a conocer de la cancelación de la audiencia y no le fijaron nueva fecha.
Respecto a la audiencia que sí le autorizaron al exlegislador Marcos “N” para definir el cambio de medida cautelar para que pueda seguir su proceso en prisión domiciliaria, la víctima señaló: “¡Es una burla! ¡Qué casualidad!”