Ya fueron sometidos a proceso dos policías preventivos que presuntamente extorsionaron a un estudiante de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) y se dio a conocer la forma como lo acosaron: supuestamente lo obligaron a realizarles una transferencia bancaria mediante su aplicación del teléfono celular y después le quitaron su tarjeta, amenazándolo para que les dieran su Número de Identificación Personal (NIP), a fin de disponer del total del dinero de la cuenta.
Lo anterior fue informado por la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción (FECC), a cargo de Juan Salazar Núñez, la cual señaló que se imputó a dos policías municipales de Cuernavaca por estar relacionados con los delitos de extorsión agravada e intimidación en agravio de un estudiante de la UAEM.
El 22 de noviembre, en la sala 3 de la Ciudad Judicial de Atlacholoaya, la Fiscalía Anticorrupción presentó datos de prueba sólidos del acoso e intimidación que después de la extorsión presuntamente realizaron los imputados contra dos jóvenes, incluso vigilándolos en sus actividades diarias. Debido al riesgo para las víctimas y los testigos, en su seguridad e integridad, la Fiscalía solicitó a la Jueza la imposición de prisión preventiva justificada, la cual fue concedida y ya se ha concretado. Ahora ya han sido sometidos a proceso.
Los universitarios relataron que el pasado 11 de noviembre, alrededor de las 10 de la mañana, dos amigos estaban en la avenida Universidad de Cuernavaca, cerca del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), cuando los interceptaron cinco unidades de la Policía Municipal y los uniformados les dijeron que los multarían porque la moto en la que iban no tenía placas, ellos no llevaban casco y tampoco portaban la tarjeta de circulación.
Refieren que los policías les pidieron dinero, por lo que uno de los universitarios hizo una transferencia de mil pesos a la cuenta de uno de los policías, pero cuando ellos vieron que el estudiante tenía más dinero, le pidieron que les diera su tarjeta y su NIP para sacar el resto del dinero, que ascendía a más de seis mil pesos.
Posteriormente, llevaron a los estudiantes a la colonia Antonio Barona, a un costado de la autopista, golpeando al dueño de la tarjeta bancaria, porque en principio les había dado un NIP falso, y diciéndole al otro joven que si lo mataban, nadie lo buscaría porque es extranjero.
Más tarde los remitieron ante el Juez Cívico, donde pagaron multas de mil y mil 700 pesos, respectivamente, sin que se les expidiera un recibo. Además, les cobraron mil 556 pesos del corralón a donde llevaron la moto.
Días después, las víctimas se percataron que los policías los vigilaban en las cercanías de la casa de uno de ellos, incluso los acosaron y siguieron dentro de la máxima casa de estudios, por lo que los jóvenes denunciaron los hechos y días más tarde, los policías fueron aprehendidos. Por su parte, la Fiscalía Anticorrupción presentó, entre los datos de prueba, el comprobante de la transferencia bancaria que el joven realizó obligado, así como el movimiento bancario que un policía hizo con la tarjeta del agraviado, desde un cajero ubicado en un establecimiento en la colonia Bellavista de Cuernavaca, lo mismo que un peritaje del vídeo de la tienda, en donde se ve al agente realizando la operación bancaria.
Asimismo, la Fiscalía Anticorrupción expuso diversas documentales, testimoniales y peritajes en contra de José Geobany “N” y José Rubén “N”, quienes solicitaron a través de su defensa 144 horas para el desahogo de la audiencia de vinculación a proceso. La FECC afirmó que de acuerdo con el artículo 20 constitucional, toda persona imputada tiene derecho “A que se presuma su inocencia mientras no se declare su responsabilidad mediante sentencia emitida por el juez de la causa”.