Todo parece indicar que la suerte en el futuro político del gobernador del estado Cuauhtémoc Blanco está echada y no es precisamente como muchos lo pensaban. Y que no irá a competir por la CDMX es quizás lo menos en los indicios que se han sucedido los últimos días y que lo colocan en una situación difícil dentro del proceso electoral para aspirar a una posición en el 2024. Lo peor que le pudo ocurrir en esta última semana es haber caído de la gracia de quienes los últimos años le extendieron su manto protector, desde el gobierno federal y la cúpula del partido al que dice pertenecer y que, asegura, “seguirá apoyando”.
No es sólo el duro revés a las aspiraciones personales del gobernador y que le cerraron el paso para competir en la interna de Morena a la CDMX. Más tarde a la confirmación que él mismo realizara en medios de comunicación de no tomar licencia para separarse del cargo, se ejecuta la liberación de uno de sus principales enemigos, el Fiscal Estatal Uriel Carmona, y luego para rematar, el ex futbolista no sería invitado a una reunión importante de morenistas, entre ellos varios mandatarios estatales.
Pero ¿será posible que Blanco Bravo esté siendo abandonado y deje de formar parte de la 4T? La respuesta puede comenzar a encontrarse en la gestión que el gobernador ha tenido y que hoy coloca a Morelos, siendo un estado relativamente pequeño, con muchos problemas a grado tal que en el tema de la inseguridad y la violencia, ocupa por estadísticas uno de los primeros lugares, en tanto que la quejas de los hombres del campo por el abandono que aseguran tener, así como la ausencia de resultados en materia de obras, salud, educación y otros rubros, finalmente hicieron razonar que con el mandatario morelense difícilmente se podrá sumar a la causa, más bien, la loza que simboliza adquiere más peso hacia el final de su administración.
Por si no fuera suficiente con esos inconvenientes, el gobierno no ha sabido o no ha querido congraciarse con la militancia y los simpatizantes morenistas, mucho menos con algunos de sus líderes. Y es que, a través de sus incondicionales, ha tratado de imponer sus intereses y su visión personal sobre los destinos del Partido al que se afilió, pero por el que no parecer haber desarrollado un sentido de pertenencia. El resultado de esta acción han sido los frecuentes encontronazos con líderes morales, efectivos y leales a la 4T y la división que hoy prevalece y con la que habrán de remar los contendientes morenistas a las elecciones del próximo año.
La sabiduría popular reza: se cosecha lo que se siembre y el peor gobernador de Morelos en su historia habría de recibir en suerte el fruto de su desafortunada gestiónque deja a los morelenses hartos de todo, un partido fracturado y segmentado, así como un estado en franco desastre, veremos…
LAS REDES: Así como pretendió irrumpir en el escenario político-electoral del estado, el Movimiento Magisterial Morenista (MMM) se diluyó. Las versiones que corren a esto que bien pudo ser un debut y despedida son varias, pero todas apuntan hacia un mal cálculo de sus operadores para poner en riesgo acuerdos tomados en escenarios más importantes que el que gira en torno a las elecciones locales, y particularmente al de la capital del estado. Y es que como aquí lo establecimos en comentarios anteriores, no es fácil cooptar la participación político-electoral del magisterio, más bien se debe ratificar la libertad de que goza y, si acaso, buscar convencerlo pensando siempre en la defensa de su materia de trabajo y de sus derechos, a ver… En medio de creciente muestras de simpatías, el registro de Margarita González Sarabia como aspirante al proceso interno de Morena en el estado, se convirtió en un acto para mostrar que son muchos los grupos sociales, militantes y simpatizantes morenistas los que han decidido sumarse. Quien fuera hasta hace poco la directora de la Lotería Nacional simboliza una propuesta sólida y seria para competir y ganar dicho proceso, veremos…
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