La violencia en Morelos no cede y eso lo vemos todos días. El lamentable atentado en contra del presidente del Partido Verde,Javier Estrada se suma a la ola de crímenes impunes que se han gestado en el estado. Este atentado en plena luz del día y en una avenida de Cuernavaca muy circulada, tanto por peatones como por vehículos, nos indica que al crimen organizado no lo detiene nadie.
Es evidente que la autoridad es prácticamente inexistente en temas de seguridad pública, no hay contrapeso real a los criminales, ni en Cuernavaca ni en el gobierno estatal. El nivel de degradación social está llegando a su límite, porque tiene que gestarse una respuesta que por supuesto rebase a la autoridad actual y esta saldrá de sociedad organizada.
El dirigente del partido verde no murió y el día del atentado trascendió que lograron mantenerlo con vida, que si bien estaba grave en cuidados intensivos se mantenía vivo, sin embargo, al día de hoy la prensa ha dejado de informar sobre la situación actual del dirigente, me parece acertado comentarlo en virtud de ser una figura pública y el desenlace debe ser del dominio público. Además de ello, la necesidad de dar seguimiento tiene que ver con una historia de impunidad en el estado de diversos actores políticos, que han sido dramáticamente asesinados y después dejados en el baúl del olvido como si nada hubiese ocurrido.
Esta administración ha sido omisa en diversos temas, pero el problema de impunidad en el estado está directamente relacionado con el tema de justicia para la sociedad en general. Uno de los preceptos con más impacto en la cuarta transformación es precisamente el de la justicia. Esta es una demanda histórica de la izquierda en el mundo y el Presidente lo tiene muy claro, por ello se ha propuesto entregar recursos a las clases más necesitadas en el país, a través de los diversos programas sociales implementados en la actualidad.La intención es hacer justicia a los sectores olvidados por años y con ello lograr que el circulante que regresa a los más pobres tenga un efecto económico importante para todos.
Pero la justicia en Morelos no parece ser un tema relevante para nadie, ni para el ejecutivo que tendría que ser el más ocupado en el tema, ni para el legislativo que se ocupa en dar pensiones doradas y perpetuas a quienes si debiera ser una preocupación la administración y la aplicación de la justicia: para los magistrados del poder judicial en Morelos. La realidad es que el poder judicial es corrupto y omiso, ignoran la ley, solo la aplican si hay dinero de por medio en algunas ocasiones. Este poder se ha hecho el reducto de la vieja clase política tradicional, el espacio que se accede a través de negociaciones de todos esos políticos ocupados más en tener espacios de poder, que en generar condiciones para generar justicia.
¿Cómo considerar a un gobierno o a un político dentro de la ideología de izquierda, si este no ve el tema de justicia como un tema prioritario en su agenda política y social? La respuesta es que no existe en la clase política tradicionalen Morelos alguien que tenga la capacidad de proponer una agenda estatal, que retome los problemas más sentidos de la sociedad morelense. Por supuesto, la justicia es un tema que no es del interés de la clase política tradicional, porque no les representa algo que abone a saciar su ambición. Por ello, la pregunta planteada arriba toma relevancia, en un proyecto de izquierda la justicia debiera ser una prioridad, porque si no hay justicia no se puede hablar de igualdad, no se puede pensar en distribuir la riqueza de manera más equitativa, como lo está haciendo el Presidente.
En fin, que en un estado impune y omiso la justicia es una palabra ajena y por tanto entonces no puede considerarse un gobierno con ideología de izquierda. Entonces a partir de esta premisa, tenemos que plantearnos que quienes son parte de todo este entramado de intereses no tienen interés en que la cuarta transformación llegue a Morelos, solo les interesa saciar su ambición, luego entonces mantenerse en un espacio de gobierno implica más saqueo con impunidad y más atraso para Morelos. Entonces necesitamos un verdadero gobierno con ideología de izquierda que se ocupe de su pueblo y no de sus propios intereses.
*IR