“Alerta máxima”

El espejo de Venus

Mientras que las autoridades del Instituto de la Educación Basica del Estado de Morelos (IEBEM) se declaran en “alerta máxima” la violencia en las escuelas secundarias de la entidad, va en aumento. Las declaraciones, señores funcionarios, no remedian los hechos, ni generan ambientes adecuados para el desarrollo de los menores.

A mediados de este mes, circuló el video de dos alumnos del turno vespertino de Escuela Secundaria General “10 de abril” del municipio de Emiliano Zapata, en el que un alumno, amenaza a otro, con un cuchillo o machete. Los dos alumnos forcejean en medio de los llamados de sus compañeros de clase, que se limitan a grabar con sus teléfonos celulares, pero no intervienen. El alumno agresor cede y libera a su compañero.

En esta semana, un par de peleas más, se volvieron virales, las protagonizadas por alumnas de la Escuela Secundaria “General Mariano Escobedo”, ubicada en el municipio de Huitzilac. Según los testimonios en las redes sociales, fueron tres días consecutivos en los que se registraron estos hechos violentos en la cancha de aquella localidad. Las riñas fueron grabadas y compartidas en redes sociales por los mismos alumnos durante días. Fueron al menos, dos hechos distintos, uno igual de violento que el otro. La saña con la que las jóvenes se golpean la una a la otra, fue azuzada por los mismos compañeros que forman un círculo alrededor de sus compañeras, mientras animan con gritos la discusión y graban con sus celulares. La euforia que el hecho genera, llama por mucho la atención. Durante tres días, se registraron las peleas y fueron subidas a las redes. Los padres aseguraron que pese a sus quejas, las autoridades fueron omisas. Las autoridades desde el IEBEM, se defienden, desde luego, con declaraciones y, justificando que el hecho se registró por lo menos, a un kilómetro del plantel, por lo que no se pudo intervenir de manera inmediata. 

Se asegura que en este caso, se incorporó a la escuela de Huitzilac al esquema de SeguriChat y se establecería la vigilancia en la periferia durante los horarios de entrada y salida de los alumnos, así como la realización de talleres y pláticas por el área de Prevención del Delito.

En el caso de los alumnos del turno vespertino de Escuela Secundaria General “10 de abril” del municipio de Emiliano Zapata, se ha conocido de la puesta en marcha de un plan de acción que incluye la aplicación del “operativo mochila” con la presencia de los padres de familia y acciones de vigilancia y asesoría de la Guardia Nacional, del área de prevención del delito y del Gobierno Municipal.

Otro video más, ahora protagonizado por hombres,  recorre las redes. Se trata de alumnos de la Escuela Secundaria General No. 4 “Valentín Gómez Farías” de la comunidad de Chipitlán en Cuernavaca. Ellos pelean en la puerta principal del plantel (donde casi siempre hay una o un vigilante que regula el ingreso al plantel y cuyo salario es pagado por los padres de familia con sus cooperaciones anuales) y el resto de los compañeros solo graban y miran el hecho, donde los golpes “en seco” sobresalen en el brevísimo video.

Pareciera ser una moda –una moda muy peligrosa--, entre los estudiantes de las escuelas públicas, el protagonizar y difundir este tipo de agresiones, como una forma de hacerse notar y definir personalidades, ellos y ellas, buscan ser tan importantes como los héroes de las narcoseries o de las películas de acción. Esa, sin duda, es una conducta censurable; pero también es censurable la postura de las autoridades educativas de ponerse al margen de estos hechos, sin involucrarse realmente… y aún más lamentable, la ausencia de los padres. Sin duda, estos casos son los menos, pero evidencian las conductas de muy alto riesgo, en las que se desarrollan nuestros niños en Morelos.

¿Que esperar de nuestras autoridades, cuando están más preocupados en traer un equipo de futbol para repetir las glorias del Zacatepec que por atender de origen esta problemática o atender la desaparición de las mujeres?  Habrá que organizarse como ciudadanos y proteger a nuestros niños, lleven nuestros apellidos o no...

SEÑAL PREOCUPANTE: Otra señal preocupante, son las amenazas o intentos de extorsión que se han comenzado a registrar en contra de maestros en algunas escuelas de la entidad. Ya los planteles educativos han sido presa del robo, algunas escuelas fueron utilizadas por indigentes para vivir durante la pandemia; otras más, son utilizadas para colgar de sus puertas, cartulinas o mantas del crimen organizado, ahora, han comenzado a amenazar a los directivos y docentes, porque han sido acosados y ¿las autoridades? En alerta máxima…

*IR