Decía Manuel Martínez Garrigos que su fuerza y presencia en la opinión pública, se basaba en su estridencia: que cuando aparecía, todos hablaban de él para bien o para mal. Siguiendo esa misma lógica y como parte de una estrategia para impulsar su proyecto político, el exgobernador de Morelos, Graco Ramírez Garrido Abreu, sale a la palestra. Le gusta verse bien. Sabe que el negarse a dar declaraciones, genera inquietud, le abre la puerta a la curiosidad y al rumor mal sano.
Tan lo sabía, que lo aprovecho bien para llamar la atención sobre el acto en el que se realizó la presentación del Frente Cívico Nacional y es que ninguno de los ahí estaban, pudieron haber generado una nota llamativa en los medios: tal vez Guadalupe Acosta Naranjo, Emilio Álvarez Icaza o Carlos Navarrete, en sus buenos tiempos lo hubieran hecho, pero ni todo su discurso generó un efecto como el silencio del exgobernante de Morelos. Su negativa a hablar, fue la nota.
Ahora, se le vio aparecer, en un evento que aglutino a gente de todos los sectores (muchos de ellos, ya preparándose para las siguientes elecciones) los festejos por los 25 años de la Fundación "Don Bosco", que dirige el otrora “Padre” Toño Sandoval. El tabasqueño selecciono muy bien con quien se dejó ver y con qué fin. No desgato sus armas.
Acompañado por su esposa, Elena Cepeda, se le vio pasar saludar y disfrutar de los efectos de esa, “su presencia incómoda” para muchos de los que estuvieron ahí. Esta vez, hablo un poco más: Según un video publicado en “La Crónica de Morelos”, los reporteros le preguntaron si buscaría algún cargo de elección popular en el 2024 y se abstuvo de opinar sobre las declaraciones de su antecesor Cuauhtémoc Blanco Bravo.
"--¿Va a volver?
--Nunca me he ido", se limitó a decir.
Esta, es la segunda ocasión en la que, el exmandatario estatal se ha dejado ver públicamente; pese a que se han iniciado más de 60 carpetas de investigación en su contra y en contra de un número importante de sus excolaboradores por parte de la administración de Cuauhtémoc Blanco Bravo. Algunos de ellos, ya han sido detenidos y recluidos en la cárcel, como la exsecretaria de obras públicas, Patricia Izquierdo; otros, siguen la batalla legal en procesos que parecieran ser interminables y sin mucho soporte legal. ¿Habrá que acostumbrarse a la presencia del exmandatario en las calles de Cuernavaca y de Morelos? Ya lo veremos… Mientras, seguirá apareciendo y “haciendo ruido” entre los medios… de ese que suele incomodar a los gobernantes. Le dirán sínico, sin vergüenza, descarado… todo lo que se le antoje, pero les aseguro que eso, no le incomoda.
Seguramente en breve, Graco Ramírez ira subiendo el tono de sus pronunciamientos y en breve, incluso, lo veremos en alguna entrevista exclusiva en los medios nacionales. Por ahora, se va con calma. No lleva prisa.
En tanto, los plazos judiciales avanzaran y sus abogados estarán atentos a cualquier indicación oficial; para que cuando llegue el tiempo, esté listo para revertir los posibles ataques que busquen inculparle.
¡A ver --me dice una amiga--, también reapareció en Morelos Rabindranath Salazar Solorio y no dicen lo mismo!
*IR