La reaparición del peor gobernador, el más corrupto, frívolo y déspota que ha tenido Morelos, Graco Ramírez Garrido Abreu, causó diversas reacciones propios y extraños, cuando se presentó el pasado fin de sema, en un evento político de corte nacional en el capital del estado, sin embargo, entre los actuales actores de los poderes públicos locales, entre los que se encuentras sus acérrimos detractores, se reservaron opiniones.
Es probable que el silencio se debe al apenas roce que algunos de los colaboradores del tabasqueño han tenido, y que tasa muy corto el cumplimiento de la promesa y del mucho ruido que se hizo para castigarlo, o bien, a que el actual régimen del ex futbolista está muy cercano de desplazar del deshonroso mote que hoy por hoy le sigue perteneciendo al perredista.
Y es que a pesar de que al menos 25 ex colaboradores de su administración son procesados por diversos delitos de corrupción, aunque sólo su secretaria de obras Patricia Izquierdo se encuentra detenida, Graco Ramírez se dice limpio y se regodea de quienes lo señalan como un político farsante, mitómano y sucio, cuyo paso por el gobierno del Morelos fue más bien parecido al de un conquistador que no dudó en saquear las arcas.
No obstante, y tras un escandaloso término de su gestión en el 2018 y de las amenazas en campaña de quien lo sucedió en el cargo, y de varios precandidatos más sobre todo del Partido de Morena, la realidad es que hoy se sabe tan impune que se da el lujo de entrar por la puerta grande, exhibirse como en casa y de plano burlarse de sus detractores.
Graco Ramírez es sin duda el mejor ejemplo de que la justicia y la ley no se aplica en Morelos para combatir la corrupción y la impunidad de los políticos y gobernantes, y muestra inequívoca de que en la tierra de Zapata le legión extranjera sigue siendo bienvenida, no importa que la entidad sea saqueada y burlados los morelenses…
L@s redes: En la víspera de la conmemoración del Día del Maestro, el próximo 15 de mayo, será anunciado un acuerdo entre el gobierno de la República y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), para incrementar el salario y las prestaciones de cerca de un millón y medio de afiliados a este gremio. En la previa de este tema, las expectativas de los docentes y trabajadores de apoyo a la educación están por las nubes, luego de que hace un par de semanas desde la Secretaria de Hacienda se insinuara que dicho aumento a los emolumentos de los trabajadores de la educación rodará el 10 por ciento, muy superior al porcentaje de los indicadores inflacionarios, por lo que de cumplirse los pronósticos, dicho arreglo marcaría un récord en la historia de estos procesos de negociación entre gobierno y SNTE. Por lo pronto y como preámbulo de lo que parece ser un año que podría reivindicar la tarea social del magisterio, a nivel nacional y local ya se han anunciado sendos eventos para conmemorar el 15 de mayo y premiar, como en el caso de Morelos, a los docentes que cumplen 15, 20, 25, 30, 35, 40 y 50 años de servicio, quienes recibirán estímulos económicos con cargo el IEBEM y a la federación. Por cierto que en este mismo marco, el pasado primero de mayo en la conmemoración del Día Internacional del Trabajo, la Sección 19 del SNTE que encabeza su secretaria general Gabriela Bañón Estrada, tuvo el tino de entregar a los dirigentes de su estructura sindical la nueva edición del Prontuario de Prestaciones de los trabajadores de la educación de Morelos, y pegó como un gancho al hígado a las autoridades educativas y del IEBEM, quienes a diferencia de las dos ediciones anteriores, se negaron a firmar el documento que ya causa revuelo entre los agremiados, debido a que ahora cuentan con un respaldo para hacer valer sus derechos y conquistas, veremos qué pasa más adelante…
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