Dice el corrido, “Año de 1919, fecha exacta, un domingo 10 de abril, le dieron muerte a Zapata” y justo con esta fecha luctuosa, que el gobierno de la 4T se la pasa por ahí donde ya sabe porque es más importante llevar al cabo la mascarada de la revocación de mandato que dentro de todo lo malo, ha servido para desenmascarar y conocer en su real situación a Adán Augusto López, flamante Secretario de Gobernación con su última actuación en el Norte del país, para cumplir la encomienda presidencial primero hace abuso del poder y se lleva un avión de la Guardia Nacional, (pos no que no) y se va a Sonora querida, tierra consentida, a hacer proselitismo a favor de su Jefe, acompañado de sus acólitos mayores como es el gobernador del estado Francisco Alfonso Durazo y el achichincle mayor de Morena, ese que dicen que es el líder Mario Delgado que donde se para queda una mancha de humedad porque siempre la riega. Estos violadores, de la ley, pero violadores, deben ser acusados, juzgados y condenados. Porque la ley es la ley. Pero de ondemialma, si ya López Obrador, sin ningún pudor, ni respeto a la nación grita de manera broncuda, “y no me salgan con el cuento de que la ley es la ley”, sólo le faltó decir, “no se hagan pendejos, aquí nomás mi chicharrón suena porque mi palabra es la ley y yo sigo siendo el rey” y no lo dijo, pero se sobreentiende al ver su risa burlona acompañada de sus aspavientos y su gritó furibundo, “no me salgan con el cuento de que la ley es la ley”, pensemos, que peligroso se vuelve este hombre que cada día da muestras de su enferma egolatría y el autoritarismo clásico de un dictador.¡Dónde quedó aquello de que nadie por encima de la Ley, Sí, que se haga la voluntad de Dios en los bueyes de mi compadre, porque la embestida puede ser brutal y el coletazo del dinosaurio, así sea un triste y lánguido Peje puede ser de fatales consecuencias para el ejercicio de la democracia en México. Ahora es cuando se explica la razón de que se haya traído a la Secretaria de Gobernación, no a un servidor de la patria sino a un servidor de del hombre de palacio, pero, recordemos que no por tradición sino porque lo mandata la constitución, la Secretaría de Gobernación es la instancia que se encarga de la política interior, de coordinar los trabajos de toda la nación, vigilando que los gobernadores, independientemente de su filiación política, deben trabajar en bien de su estado, de sus gobernados y por ende de todo el país vamos, es la piedra de toque del gobierno, el que tiene que vigilar la cohesión de todos los mexicanos, en respeto de la pluralidad que es la democracia y no hacer de contlapache para satisfacer necedades de un hombre que nunca va sentirse satisfecho, si no se pliegan todos a sus caprichos, así vayan en contra del espíritu de la ley. Estemos preparados para el berrinche y la reacción que pueda tener AMLO, si cuando menos no reúne once millones de votos, porque sus fieles servidores están haciendo hasta lo imposible por convencer a la ciudadanía a ir a las casillas, porque la angustia que reflejó Doña Claudia en el monumento de la Revolución, se pudo advertir, ella discursa igual que su jefe, usa los mismos adjetivos, se mueve igual o mejor que el presidente y denosta, injuria y califica a sus “adversarios” igual que se hace en la mañanera. No hay duda, si camina como pato, grazna como pato y mueve la colita como pato, ¡Yupi! Es pato. Piensa mal y acertarás, dicen los que saben, pero todo hace que pensemos que llegado el 24 el presidente quiere un INE a modo, que posiblemente le permita aparecer en las boletas de elección, y quiere que el Poder Judicial y el Legislativo, le pavimenten el camino para “una ampliación de mandato “ y pueda cumplir con sus promesas de campaña, lo malo es que el señor lleva dos años y meses de campaña y la cosecha de mujeres nunca se acaba, Aguas, que nos agarren con los dedos tras de la puerta y como dice el gobernador de Zacatecas, que ante su ineptitud, hasta católicos se vuelven, porque afirma; “Que Dios nos agarre confesados”. Ojalá y no. Ahora solos, los campesinos conmemoran los 103 años de la muerte del Jefe Zapata, ¡la lucha sigue! Porque sólo el espíritu zapatista puede y debe proteger a los campesinos de todo México, pero en especial a los indígenas-campesinos ¡que viven de lo que produce la tierra! Los de Chiapas, Tabasco y Yucatán y Quintana Roo, que “si no entregan sus tierras para que pase el tren Maya, las expropiaremos”, palabras dichas en la mañanera desde Palacio Nacional, que no se puede dudar que se cumplan, porque lo sucedido en la Suprema Corte de Justicia, cuando “no votan ni a favor ni en contra, más bien todo lo contrario”, sólo ratifican la terrible y amenazadora expresión presidencial, “no me vengan con el cuento de que la ley es la ley” y la Corte deja a todo un país colgado de la brocha para que por otro capricho sigamos respirando aire sucio y sigamos siendo “un pueblo bueno”. HASTA LA PROXIMA.
*IR